IMPULSO/ Agencia SUN
San José, Costa Rica
El presidente Enrique Peña Nieto y su delegación son esperados la noche de hoy martes en Costa Rica para que mañana participen en un hotel de las afueras de la capital costarricense en la XVI Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno del Mecanismo de Diálogo y Concertación de Tuxtla, la máxima instancia de comunicación política de Centroamérica y República Dominicana con México y Colombia.
Los trabajos de la cumbre se intensificaron hoy con una reunión de vicecancilleres y delegaciones técnicas de los 10 países que integran el bloque—México, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, Panamá y República Dominicana, El Salvador, Nicaragua y Belice—y emisarios de organismos multilaterales, como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), y la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (SIECA).
La representación mexicana en las pláticas de hoy en la mañana es conducida por María Eugenia Casar Pérez, comisionada presidencial del Proyecto Mesoamérica (PM) y directora ejecutiva de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo, informaron fuentes oficiales.
Las comitivas están discutiendo los términos de la declaración que será suscrita mañana por Peña Nieto y sus colegas de Colombia, Juan Manuel Santos, y de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, y se espera que también por los de Panamá, Juan Carlos Varela, de Guatemala, Jimmy Morales, de Honduras, Juan Orlando Hernández, y de República Dominicana, Danilo Medina.
México y Colombia reconfirmaron la asistencia a la cumbre de los presidentes Peña Nieto y Santos, mientras que la cancillería de Costa Rica está a la espera de que los otros gobernantes confirmen su asistencia.
La llegada a la cita de los presidentes de Nicaragua, Daniel Ortega, y de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, y del primer ministro de Belice, Dean Barrow, todavía sigue sin ser confirmada por la cancillería costarricense y en círculos diplomáticos prácticamente se da por descartada.
En tanto, fuentes diplomáticas informaron que Peña Nieto llegará esta noche a Costa Rica, aunque se abstuvieron de informar en detalle sobre la hora. El gobernante mexicano arribará a este país en compañía del secretario de Relaciones Exteriores de México, Luis Videgaray, y del resto de la delegación mexicana.
“La presencia de seis jefes de Estado reafirma la importancia de este espacio mesoamericano”, dijo el vicecanciller costarricense y comisionado presidencial del PM, Alejandro Solano.
Sin referirse mencionar directamente al impacto de las nuevas políticas migratorias y comerciales de Washington tras el ascenso en enero pasado de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, Solano afirmó que la cumbre se realiza “ante los nuevos retos y desafíos de la región”.
El encuentro, aseveró, “abre nuevas oportunidades para el diálogo político para que los gobernantes de la región compartan sus visiones sobre los problemas comunes, delimiten los grandes objetivos y ratifiquen esa voluntad de trabajar en una agenda de cooperación articulada bajo el Proyecto Mesoamérica”.
Los gobiernos del área reaccionaron con inquietud ante la decisión de Trump de que EU adopte políticas comerciales proteccionistas y endurezca las acciones en contra de la migración irregular, un tema especialmente sensible en México, Guatemala, El Salvador y Honduras como generadores de migrantes.
Sesiones
La cancillería de Costa Rica informó a EL UNIVERSAL que la Reunión de Comisionados Presidenciales del Proyecto Mesoamérica empezó hoy en la mañana en el hotel sede de la cumbre.
Según el reporte oficial, Videgaray y sus contrapartes de Colombia, María Ángela Holguín, de Costa Rica, Manuel González, de Nicaragua, Denis Moncada, de Panamá, Isabel Saint Malo de Alvarado, de El Salvador, Hugo Martínez, de Guatemala, Carlos López, de Honduras, María Dolores Agüero, de Belice, Wilfred Elrington, y de República Dominicana, Miguel Vargas, se reunirán hoy en la tarde, para continuar las deliberaciones.
“El Proyecto Mesoamérica tiene impacto en la población”, adujo Solano.
“Es un marco de acciones en miles de personas a lo largo y ancho de toda la región mesoamericana, que han resultado beneficiadas con obras vinculadas a la facilitación de infraestructura, con temas de interconectividad eléctrica, de facilitación de comercio y de desarrollo agrícola”, describió.
El bloque político, que es un grupo de alto nivel para articular la cooperación regional, fue creado en 1996 con una declaración Conjunta de los jefes de Estado y de Gobierno de Centroamérica y México e inicialmente se conoció como Plan Puebla-Panamá y posteriormente como Proyecto Mesoamérica.
Los antecedentes del mecanismo se remontan a 1991, cuando los entonces presidentes de México, Costa Rica, Nicaragua, El Salvador, Honduras y Guatemala establecieron pautas de cooperación regional en asuntos políticos y socioeconómicos.
De acuerdo con la exposición oficial, la cumbre busca promover las alianzas público-privadas como eje transversal en la búsqueda del desarrollo inclusivo y el fortalecimiento del PM, en sus ejes de trabajo, económico y social.