IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad De México
Cuando empiezas a presentar síntomas de gripa, es fácil rendirse ante la idea de que en los próximos días serás un foco de infección andante.
La gripa común es una infección viral en la garganta y nariz, también conocido como tracto respiratorio superior. Muchos virus pueden causar este problema, pero el principal culpable es el rhinovirus.
Dolor de garganta, mocos, congestión nasal, cuerpo cortado, estornudos y fiebre leve pueden dejarte exhausta antes de que los síntomas empiecen a desaparecer. Y aunque por lo general son inofensivos, puede tomar 1 semana (o más) para dejar de sentirte como un zombie.
¿Qué es lo mejor que puedes hacer para aliviarte rápidamente? Detener la enfermedad antes de que se apodere de tu cuerpo. De hecho, hay muchas formas de prevenir los síntomas y acortar su duración.
Vitamina D
Hay investigaciones que demuestran que las personas que no reciben suficiente vitamina D (sol) son más propensas a sufrir infecciones respiratorias. Esto sucede porque las células dependen de la vitamina D para activar la respuesta de lucha contra infecciones.
Actualmente, el Instituto Nacional de Salud sugiere que la mayoría de los adultos busquen al menos 600 IU por día, pero algunas organizaciones recomiendan mucho más que eso. Obtener suficiente vitamina D a través de una dieta es difícil, pero puedes salir de casa a tomar el sol o comprar suplementos.
Saca el humidificador
La baja humedad seca los conductos nasales, dificultando la eliminación de los microbios que se asientan en los senos paranasales, lo cual provoca un resfriado. ¿La solución? Invierte en un humidificador y mantenlo funcionando cuando el aire comience a sentirse seco.
Un humidificador puede ayudar a mantener las membranas mucosas húmedas, las cuales inhiben la habilidad del organismo de atrapar gérmenes que entran al cuerpo.
Duerme
Por experiencia propia puedo decirte que no hay nada mejor para un resfriado que una excelente noche de sueño. Y según un estudio de JAMA Internal Medicine, las personas que regularmente duermen menos de 7 horas tenían 3 veces más probabilidades de tener un resfriado y sufrir peores síntomas.
Zinc
Hay investigaciones que sugieren que el zinc disminuye el crecimiento de varios virus. Sin mencionar que su consumo (típicamente en forma de pastillas o aerosoles nasales de gluconato de zinc) reducen la duración y severidad de los síntomas, incluso cuando están empezando, según el Instituto Nacional de Salud.
Aunque la dosis apropiada se desconoce, hay estudios que sugieren que se notan grandes beneficios con dosis diarias de 75 miligramos. El INS sugiere que la mayoría de los adultos necesitan menos si consumen alimentos ricos en zinc como carne, tofu y lentejas.
Probióticos
No todas las bacterias son malas; los probióticos de tus intestinos puedes encontrarlos en alimentos como el yoghurt, y le dan un empujón increíble a tu sistema inmunológico. Después de todo, una gran porción de éste se encuentra en el tracto grastrointestinal.
En el 2014, un estudio publicado en el Diario de Ciencia y Medicina en el Deporte descubrió que los jugadores de rugby que tomaban probióticos experimentaban menos resfriados e infecciones grastrointestinales.
Se requiere mayor investigación para confirmar que, en efecto, los probióticos evitan el virus de la gripa, pero hay estudios que sugieren que éstas bacterias son benéficas cuando se presentan síntomas.