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Dubai
Dubái tiene lo suyo: es la tierra perfecta para tener el mejor Instagram de todos tus amigos, acariciar un leopardo en el asiento de un Bentley y disfrutar de todas las maravillas que una economía petrolera bien organizada te puede ofrecer. Claro, mentalízate para ignorar todas las violaciones a derechos humanos —con una ‘pizca’ de machismo— y estás listo para unas vacaciones de ensueño.
Sin embargo, entre todo el glamour y los rascacielos, Dubái está viviendo uno de los casos más misteriosos de nuestros tiempos: una de las princesas lleva desaparecida más de 4 meses.
La princesa Latifa
Latifa Bint Mohammed bin Rashid Al Maktoum, mejor conocida —y googleada— como princesa Latifa, es la “hija rebelde” del primer ministro de los Emiratos Árabes Unidos y jeque de Dubái. La princesa nació en 1985 y es una experta paracaidista con un marcado gusto por la adrenalina.
A primera vista, parecía una persona que lo tenía todo: oro, dinero y palacios, pero también tenía que vivir en una jaula de oro en la que era torturada física y psicológicamente, restringida de muchas actividades y sin poder tener cierto tipo de amistades, además de que hablarle a ciertos miembros de su familia con jerarquía diplomática, estaba prohibido.
¿Un último detalle? Nadie ha visto a Latifa desde el 4 de marzo.
Sus amigos, conocidos y las últimas personas que la vieron con vida, aseguran que Latifa fue secuestrada a bordo de un barco por las propias autoridades de Dubái, después de intentar uno de los escapes más épicos que ha visto la historia mundial.
Latifa huía de su padre, el jeque, a quien acusa de ser un asesino y de la violencia que se vive en el Emirato que está bajo su poder.
El escape
La princesa Latifa huyó con su amiga, la finlandesa Tiina Jauhiainen y el exespía francés, Hervé Jaubert, acusado y con órdenes de captura por malversar fondos en Emiratos Árabes.
El escape original incluía salir buceando de Dubái, pero cambió los planes por escapar en carretera hasta cruzar la frontera hacia Oman. Una vez en el país vecino, tomó un jet-ski junto a Jauhiainen hasta llegar a aguas internacionales. En medio del mar, un barco con Jaubert al mando: el Nostromo; la esperaba para llevarla a la India y consumar su búsqueda de asilo político.
Hervé Jaubert: exespía francés que navegaba la embarcación en la que pretendía huir la princesa Latifa de Dubái Foto: Free Latifa
Mientras se acercaban a Goa, navegando en el océano Índico, el Nostromo perdió toda señal satelital.
Estando en aguas internacionales, un séquito de la dinastía, los interceptó y con bombas de gas obligaron a los tripulantes a salir a cubierta, golpearon violentamente a los navegantes y se llevaron por la fuerza a la princesa, quién antes de escapar, había enviado a Human Rights Watch para Oriente Medio, un vídeo de 40 minutos de duración, donde relata su historia, los motivos de su escape, y donde solicitaba que si después de cierto tiempo no sabían nada de ella, difundieran el vídeo a nivel internacional.
El video de auxilio
“Si están viendo esto, es porque estoy muerta o en una situación muy mala”, así comienza un video grabado por la princesa Latifa en el que a lo largo de 40 minutos, cuenta su vida y las razones para su escape. Este video me puede ayudar porque la única cosa por la que se interesa mi padre es por él mismo. Él podría matar a gente para mantener su propia reputación. Este vídeo podría salvar mi vida”
¿Dónde está Latifa?
La directora de Humans Right Watch para oriente medio, Sarah Leah Whitson, emitió un comunicado para exigir a las autoridades de Emiratos Árabes Unidos, que revelen de inmediato el paradero de la princesa Latifa, que confirmen su estado y permitan su contacto con el mundo exterior.
Sin embargo, hasta el día de hoy la corte real no ha emitido ninguna respuesta sobre el destino de la princesa y por el contrario una fuente del gobierno de Dubái ha dicho que se trata de un “asunto privado”, pero la realidad es que a cuatro meses de su intento de huida y desaparición, nadie sabe cuál ha sido el paradero final de la princesa Latifa. SOPITAS