IMPULSO/ Ernesto Hernández Alarcón
Toluca
- La Falla de San Andrés
Estamos en la antesala de una nueva temporada de la NBA, movimientos de jugadores bastante interesantes y, de hecho, sorpresivos. La radiografía de la Liga mantiene una constante: elitismo, pocos Goliaths y demasiados Davids. Los Warriors de Golden State son el conjunto a vencer. Un equipo casi perfecto y bien equilibrado. Bajo mi apreciación, tendría que pasar una desgracia monumental (que la falla de San Andres provoque un terremoto que destruya Oakland, por ejemplo), para que los actuales campeones no logren el bicampeonato.
En la Conferencia del Oeste, veremos de nueva cuenta a los equipos más competitivos. El Thunder de Oklahoma, con la adición de Carmelo Anthony, en teoría presenta una quinteta que brindará una cabal batalla a Kevin Durant y compañía. El alero recién llegado de Nueva York deberá asumir un rol menos protagonista si de verdad quiere disputar una final de conferencia. Bajo mi apreciación, y solo si el citado Anthony conecta bien con Paul George y Russell Wilson, será el único tándem que estará al nivel de Golden State. ¿La diferencia? La profundidad de su banca. Los Rockets de Houston, como ya es su costumbre en los últimos años, llegarán a la postemporada bien posicionados, con números exorbitantes de James Harden y con un cúmulo de jugadas impresionantes cortesía de Chris Paul que permitirá que sean uno de los mejores espectáculos del circuito (no vislumbro problemas de egos entre estas dos estrellas). Sin embargo, mientras no logren desarrollar una verdadera cultura defensiva, la cual puede mejorar este año pero no maximizarse, difícilmente los veo superar la barrera de las semifinales. Por su parte, Spurs de San Antonio, siempre eficientes, bien entrenados y con una conjunción única, por primera vez en muchos años darán un paso hacia atrás.
El tema de LaMarcus Aldridge (de quien se esperaba un gran impacto y ha quedado muy corto), cobrará factura. Kawhi Leonard es un gran atleta, un fuera de serie (con una lesión reciente que lo ha dejado fuera de la pretemporada), empero, es fundamental que asuma un rol de mayor liderazgo. Los Timberwolves de Minnesota serán el “team” que subirá sus bonos y que se convertirá en uno de los principales protagonistas. Son una precisa combinación de veteranía y juventud, toda plagado de talento y comandado por un entrenador que ha demostrado capacidad de sobra. Tom Thibodeau orquestará el destino de Andrew Wiggins, Karl Anthony Towns, los recién adquiridos Jimmy Butler, Taj Gibson, Jeff Teague y Jamal Crawford, que en apariencia, no tiene otro objetivo más que la postemporada, y tal vez, mucho más. Ningún equipo los querrá tener de frente. Los Lakers de Los Ángeles van a dar un gran paso también, tal vez, con un poco de inspiración, alcancen los “play-offs”. Este proyecto me gusta, Lonzo Ball, Brandon Ingram, Jordan Clarkson, etc. forman una plataforma de talento y juventud que muy próximamente generará satisfacciones a sus muchos seguidores; abundaremos.