IMPULSO/ Agencia SUN
Cancún, QR
Directivos de un Colegio de Bachilleres de Cozumel organizaron una fiesta de graduación para el alumnado; sin embargo, colocaron en el salón del festejo un muro de madera para dividir a estudiantes que pagaron la ceremonia y quienes no, lo que constituye un acto de discriminación que derivó en la apertura de una queja de oficio por parte de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Quintana Roo (CEDHQROO).
Usuarios de redes sociales denunciaron el caso y criticaron al Colegio de Bachilleres, dirigido por Jesús Aguilar Arechiga, por hacer dicha distinción de estudiantes.
De acuerdo con la denuncia exhibida en redes sociales una empresa privada fue contratada para organizar la ceremonia de graduación de los estudiantes de Bachillerato, en el Centro de Convenciones, en días pasados. La empresa fue la encargada de hacer la separación entre quienes pagaron y no la cena, mediante brazaletes, además de poner una cerca para que los estudiantes que no realizaron el pago y sus familias, fueran divididos en el mismo evento, de quienes sí pagaron.
Sin embargo, el ómbudsman estatal, Harley Sosa, indicó que, al tratarse de una ceremonia del Colegio de Bachilleres para la entrega de certificados a integrantes de la generación 2014-2017 de ese plantel, se presume la responsabilidad de autoridades de ese colegio por incurrir en actos que se presumen discriminatorios.
“Ellos pueden decir que fue la empresa, pero ahí autoridades del plantel entregaron documentación oficial, no debieron haber permitido este acto que, a todas luces, es discriminatorio”, declaró en entrevista con EL UNIVERSAL.