Por: Arturo Albíter Martínez
- Desde que llegó la administración de AMLO el campo ha dejado de ser productivo.
- Para el 2022 la falta de apoyos y el encarecimiento, sobre todo de insumos como el fertilizante, provocarán que se deje de sembrar cerca del 50% de las tierras cultivables.
- Dato del día: Banxico estima que el cierre del año la inflación estará en niveles de 7.6% y la economía crecerá menos.
- Mientras tanto, AMLO acusa a los empresarios de abusar y elevar los precios.
Desde hace varios sexenios el apoyo al campo ha registrado serias contracciones, pero ninguna como la que se ha observado en los últimos tres años, los actuales gobiernos estatal, pero sobre todo el federal han provocado que la producción en este sector se note seriamente afectada.
Para líderes campesinos de diferentes organizaciones, el retraso en la producción del campo ya suma al menos 30 años, resultado de las políticas que han implementado sobre todo en la federación, pero de una forma más notoria en la actual administración de Andrés Manuel López Obrador.
El recorte de recursos fue una constante durante los últimos tres años y la política en este sector ha cambiado radicalmente, los apoyos dejaron de ser en beneficio de la productividad y se transformaron en apoyos de tipo social que de poco sirven a los trabajadores del campo.
Para líderes del sector como es el caso de Vicente Álvarez, quien encabeza la organización más importante relacionada con el maíz en la entidad, ha manifestado en repetidas ocasiones que las condiciones en el campo mexiquense son cada vez más críticas.
En los dos últimos años, la política relacionada con el campo se ha transformado y en tiempos de pandemia la situación se ha complicado aún más.
Muchos programas con participación del gobierno federal y estatal han dejado de funcionar.
Las delegaciones estatales que en otro momento eran las que tenían relación directa con los campesinos y hacían funcionar los diferentes programas de apoyo, ahora son prácticamente oficinas que sirven de muy poco
Lo peor es cuando, la política del Estado de México se convierte en algo similar a lo que plantea la federación. Que los recursos son para apoyar a los campesinos en programas de corte social y dejan de lado los de productividad.
Y como lo hemos repetido en diferentes ocasiones en este espacio, una vez más el nombre de la dependencia fijo un cambio en el rumbo. Deja de ser de Desarrollo Agropecuario y se transforma en la del Campo. A simple vista parecía que era un asunto de palabras, pero cada vez ha sido más notorio el cambio en la vocación, lo cual sostienen líderes de diferentes organizaciones.
DISMINUIRÁ 50% SUPERFICIE CULTIVADA EN EL 2022
Si la producción de semillas registró una disminución durante el año de la pandemia, para el 2022, el asunto será todavía más complicado, pues el encarecimiento de los insumos, sobre todo el fertilizante obligará a los campesinos a sembrar menos superficie.
El precio del fertilizante es un asunto que preocupa en extremo, pues en lo que va del año aumentó en un 100 por ciento y el costo del diésel también se ha incrementado de tal forma que afecta los costos de producción.
Sembrar sin poner fertilizante es la forma más segura de perder el dinero y si alguien dice que el Gobierno del estado brida apoyo con la entrega de fertilizante, es por demás decir que sirve de muy poco por varias razones.
Para empezar, el producto que ofrecen es de baja calidad, luego no le llega a todos los campesinos, pero además como el responsable de hacer la entrega, en este caso el subsecretario “Lalo” Flores que debe conocer muy poco del campo, hace afectivo el programa cuando ya no lo necesitan.
A los pequeños productores no les va a convenir sembrar maíz, porque será más caro producirlo y el precio del grano en el mercado no será el suficiente para recuperar al menos la inversión, con todo y que se tiene previsto un incremento.
Esto va a provocar aumento en el precio de muchos productos, especialmente la tortilla.
COMENTARIO DEL DÍA: INFLACIÓN AL ALZA AL FINAL DEL AÑO Y AMLO CULPA A EMPRESARIOS
Especialistas de Banxico estiman que la inflación cerrará en 7.6% y la economía será menor a la que esperaban.
El precio de productos y servicios continuará al alza y mientras eso pasa, el presidente Andrés Manuel López Obrador en lugar de trabajar en una política con la cual afrontar una situación de este tipo opta por lo más sencillo que es acusar a los empresarios de abusar en este momento.
