Por: Arturo Albíter Martínez
- Preocupa la violencia contra las mujeres, las estadísticas registran anualmente incrementos y el Estado de México es de los territorios donde más feminicidios ocurren.
- ¿Sirven las manifestaciones de grupos feministas radicales? ¿Se manifiestan por la violencia contra las mujeres y ellas evitan lastimarlas en sus marchas?
- Comentario del día: Enrique Vargas del Villar es uno de los aspirantes a candidato para gobernador más visibles. ¿Es positivo para su imagen mostrarse violento, aunque sea para defender al gobernador?
En el Estado de México, el más poblado del país decir que más del 50% de las mujeres son violentadas por sus parejas no debe ser un dato que pase desapercibido, tampoco el hecho de que regularmente, es el territorio donde más feminicidios se cometen, aunque luego digan que por cada cien mil o diez mil habitantes entonces el problema ya no es “tan” grave.
De cualquier forma es una situación que cada año se comenta y las estadísticas se mantienen iguales o empeoran. La percepción de inseguridad de las mujeres mexiquenses también es de las más altas del país, según el INEGI en el último reporte que dio a conocer, más del 80 por ciento se siente insegura en el lugar donde vive.
La violencia intrafamiliar se incrementó considerablemente tanto en el país como en la entidad. Simplemente el año de la pandemia este delito aumentó un 84% de acuerdo a un estudio realizado por el Instituto de Estudios Legislativos.
En el ámbito nacional, se cuenta con otro dato que es altamente revelador, se supone que para una mujer, la casa es el lugar donde desarrolla gran parte de sus actividades, pero en los últimos años el 20% de las mujeres mayores de 18 años dijeron sentirse inseguras en ese espacio.
Del total de delitos cometidos contra las mujeres, el 10.8% son de tipo sexual.
Cuando nos referimos al acoso o violencia sexual en la calle, de igual forma las mujeres son las más afectadas pues el 22.8% de las que viven en zonas urbanas declararon que en algún momento sufrieron intimidación sexual.
¿SIRVEN DE ALGO LAS MANIFESTACIONES FEMINISTAS DE RADICALES?
Si nos basamos en las estadísticas, no han funcionado, ese tipo de manifestaciones que causan molestia e irritación en las mismas mujeres no abonan a una solución al problema, incluso lo hacen más agudo.
Se supone que se manifiestan por la violencia contra las mujeres y a esos colectivos de feministas radicales no les importa o interesa si a su paso violentan a las mismas mujeres como ocurrió ayer en el centro de Toluca, cuando policías, periodistas y personal de auxilio resultaron lesionadas o lastimadas durante la manifestación.
Se vuelve un conflicto mayor cuando además de agredir y destruir mobiliario público esconden su rostro, lo que lleva a más de uno a pensar que son grupos radicales pagados.
Lo cierto es que han fallado las políticas de protección a las mujeres y tampoco abonan las manifestaciones violentas.
COMENTARIO DEL DÍA: ENRIQUE VARGAS ES UNO DE LOS ASPIRANTES A CANDIDATO PARA GOBERNADOR. ¿ABONA A SU IMAGEN MOSTRARSE VIOLENTO EN LA LEGISLATURA?
Uno de los hechos más comentados durante la semana fue el enfrentamiento verbal que se registró en la sesión de la Cámara de Diputados entre el líder de la bancada del PAN, Enrique Vargas y el legislador morenista Ariel Juárez.
Si bien Ariel Juárez se extralimitó al hablar de supuestos actos de corrupción de parte del mandatario en el caso del Salario Rosa, porque acusó sin pruebas, ninguno de la bancada del PRI se levantó a reclamar tan airadamente como lo hizo Enrique Vargas del PAN.
Incluso los priistas calmaron los ánimos y como es común desde la Legislatura pasada, nadie del tricolor se enfrenta a los de Morena.
Lo preocupante es que Enrique Vargas con claras intenciones de ser candidato a gobernador por la Alianza o su partido, se muestre violento o que no es complicado sacarlo de sus “casillas”.
Tiene historial que no abona a su favor en ese sentido. Maurilio Hernández no se va a prestar a una escena de ese tipo, para eso tiene a legisladores como Ariel Juárez. Elías Rescala del PRI tampoco porque no tiene permitido pelearse con los de Morena.
Pero “compro” pleito ajeno Enrique Vargas y aunque fue para defender al ejecutivo, ese arrebato no le servirá para ganar simpatías y tampoco servirá para que el mismo mandatario lo vea como un aliado al que le entregue la candidatura.
A final de cuentas, la escena le sirve a sus detractores para restarle puntos en la carrera rumbo a la gubernatura.
