IMPULSO/Arturo Albíter Mtz.
Candidato de Morena muestra poca civilidad política en Tlalnepantla
Parece que las elecciones se han vuelto asuntos viscerales, lo primero que deberían entender los candidatos es que compiten por el voto de los ciudadanos, no están en guerra y tampoco deben ver como enemigos al resto de los aspirantes.
Ahora que la violencia en la sociedad es cosa de todos los días, los candidatos debían mandar un mensaje de civilidad para evitar, en primer lugar, enfrentamientos y, en segundo, revanchas políticas, sólo basta recordar que ya van más de 90 aspirantes que han muerto es el país en hechos violentos.
Lo anterior se desprende de algo tan simple como un saludo, en otros momentos, los códigos entre los políticos eran claros, si encontrabas en la calle a un personaje de otra corriente partidista, lo más natural era saludarse, aunque tuvieran diferencias ideológicas.
Ahora parece que esto se le olvidó a varios candidatos, en este caso, a Raciel Pérez Cruz, representante de Morena en Tlalnepantla.
Hace un par de días en uno de los centros de reunión de políticos y funcionarios en la cabecera municipal, se encontraron los principales contendientes en dicha demarcación: Raciel Pérez y Luis Manuel Orihuela.
El segundo se acercó con civilidad a saludar al candidato de Morena, pero Raciel Pérez lo dejó con la mano estirada y fingió desatención.
En otro momento, el gesto quizá pasaría desapercibido, ahora que lo más importante es mandar a la población un mensaje en contra de la violencia y el enfrentamiento, éste resulta un mensaje de enfrentamiento.
Dentro de casi 50 días, uno resultará ganador y se supone también que deberá gobernar para todos.
Quizá la acción se deba a que Raciel Pérez empezó arriba en las encuestas y, a un par de semanas de iniciar la campaña, ya se encuentran en “empate técnico”.
Importantes acuerdos resultan de la Reunión Nacional contra el Secuestro
Los primeros días de esta semana, se llevó a cabo la Reunión Nacional del Grupo de Planeación y Análisis Estratégico contra el Secuestro en Oaxaca y dejó importantes acuerdos.
Entre los más importantes está el seguimiento procesal y vinculación con el sistema penitenciario, que se refiere a tener conocimiento del panorama que guardan los grupos delictivos en estos lugares, en este caso, los que se dedican al secuestro y extorsión.
Otro acuerdo más fue la vinculación con el C5 para incorporar información a las carpetas de investigación que están relacionadas con el delito de secuestro.
De igual forma, se determinó que se tome en cuenta la homologación del delito de extorsión en sus diversas modalidades para analizar la posibilidad de crear una ley especial para el combate del delito de extorsión.
También se tomó en cuenta la capacitación, de forma que las instancias de procuración de justicia del país podrían mandar a titulares de unidades especializadas para recibir un curso en Estados Unidos.
Éstos fueron algunos acuerdos que se tomaron en lo general, aunque todavía queda pendiente el tema de las estadísticas que se registraron en el país y en el Estado de México.
