IMPULSO/ Agencia SUN
Ciudad de México
El ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) fue condenado a nueve años y medio de prisión por corrupción y lavado de dinero, un fallo que sus abogados apelarán “en todas las cortes imparciales, incluyendo las Naciones Unidas”.
Lula fue hallado culpable de recibir un apartamento en el balneario de Guarujá (Sao Paulo), ofrecido por la constructora OAS a cambio de su influencia para obtener contratos en Petrobras. El caso se inscribe en la Operación Lava Jato que reveló multimillonarios desvíos de fondos de la petrolera estatal Petrobras hacia todo el arco político.
A diferencia de otras sentencias en las que el juez Sergio Moro, a cargo del caso, decretó la detención y prisión preventiva del condenado, decidió que Lula “podrá presentar su apelación en libertad” en un afán por evitarle “ciertos traumas”.
Moro, convertido en una suerte de héroe nacional por los detractores del fundador del Partido de los Trabajadores, también prohibió a Lula ejercer cargos públicos por 19 años. La sentencia tendrá que ser confirmada o denegada en la segunda instancia. (Informador)