IMPULSO/ Edición Web
Corea del Norte
Corea del Norte y Corea del Sur acordaron celebrar una cumbre en abril en su frontera fuertemente militarizada y Pyongyang afirmó que consideraría renunciar a las armas nucleares a cambio de garantías de seguridad, informó el martes un emisario surcoreano.
Los dos países acordaron asimismo abrir una línea de comunicación directa de urgencia entre sus dos dirigentes, anunció Chung Eui-yong, consejero para la seguridad del presidente surcoreano Moon Jae-in, tras reunirse con el líder de norcoreano Kim Jong Un en Pyongyang.
La cumbre tendrá lugar a finales de abril en la localidad de Panmunjom, en plena Zona Desmilitarizada (DMZ) que separa a los dos países, y estará precedida de una conversación telefónica entre Kim y Moon, precisó.
Durante la duración del diálogo intercoreano, el régimen de Pyongyang prometió suspender sus ensayos nucleares y de misiles, afirmó Chung Eui-yong.
Y agregó que Corea del Norte expresó también la voluntad de desnuclearizarse a condición de que se garantice su seguridad.
Esta será la tercera cumbre entre los dirigentes de ambos países que se celebra desde el fin de la guerra de Corea (1950-1953). Las dos anteriores tuvieron lugar en 2000 y en 2007.
“El Sur y el Norte están de acuerdo en una línea de comunicación de urgencia entre los dirigentes para desactivar las tensiones militares y en coordinarse estrechamente”, afirmó el emisario surcoreano.
Chung y los diplomáticos surcoreanos que lo acompañaron a Pyongyang son los más altos responsables de Corea del Sur que viajan al Norte desde hace más de diez años, aprovechando el histórico acercamiento realizado con ocasión de los Juegos Olímpicos de Pyeongchang.
Sus conversaciones con Kim Jong Un duraron más de cuatro horas.
Los emisarios surcoreanos tienen previsto partir el miércoles hacia Washington para informar sobre este viaje. Estados Unidos acaba de imponer nuevas sanciones unilaterales a Corea del Norte, las más duras hasta la fecha según el presidente Donald Trump.