IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad De México
Han pasado tres semanas desde el asalto a la casa del actor Ignacio López Tarso y su hijo Juan Ignacio Aranda aseguró que no ha habido avances por parte de las autoridades, en la identificación y detención de los posibles responsables.
“No encuentran a nadie, sólo saben que son colombianos, que están asolando el sur de la Ciudad de México y ya”.
El también actor explicó que le pidieron no dar a conocer el video, donde se muestra el momento del asalto, por seguridad de la familia.
“Hay un video mejor al que yo tomé, una vecina me dijo ‘oiga yo los tengo’, me pasó una copia y ya se lo llevé al Ministerio Público, entonces ellos están haciendo su labor, rápido o lento, pero no ha pasado nada”, lamentó.
Tras levantar la denuncia a dos horas de que se llevó acabo el atraco, Aranda ha tenido que ir tres veces al Ministerio Público para ampliar su declaración, y ahora sólo le resta esperar a que las autoridades hagan su trabajo.
“Espero que sepan cómo y los encuentren, porque saben que son una banda colombianos que se están especializando en el robo a casa habitación sin violencia, somos muchos asaltados, ¡ya que los agarren!”.
Por otro lado, a Juan Ignacio Aranda no le ha ido bien profesionalmente, ya que asegura que en este año el trabajo fue escaso y a pesar de que no ha dejado de hacer casting, se ha visto obligado a aceptar proyectos que no le convencen del todo, como la serie “El último Dragón”.
“Son de esos momentos en que el actor dice: lo hago o no lo hago, sí lo hago. Siempre está la posibilidad de que uno diga no, entonces sí puede llegar algo mejor ¿pero si no? Todo este año he estado esperando y tengo una hija que se me va a Holanda, es antropóloga. Yo digo que la educación de los hijos llega hasta que termina, finalizó con honores la universidad y ahora se va a especializar en antropología médica ¿Cómo negarle el apoyo?”.
Lo que no le convence de su personaje que es un chicano, es que no tiene un buen sustento y lo percibe de relleno, a pesar de que es una historia de Arturo Pérez-Reverte, “digamos que el reto es dejar de ser un político corrupto y ser un chicano narcotraficante corrupto, entonces dejaré de tener la agilidad mental de un político como Ramiro Silva de la Garza (El señor de los Cielos), un personaje muy bueno, vistoso, espectacular; éste es un chicano que habla poco y mal”.
