No se derribarán más casas, por lo que llamaron a la población para no dejarse llevar por rumores.
David Esquivel/Tlalnepantla
La alcaldía de Tlalnepantla anunció que concluyó la demolición de 11 casas del cerro del Chiquihuite donde ocurrió el desgajamiento el pasado 10 de septiembre, que dejó un saldo de cuatros personas fallecidas y al menos 300 damnificados. Las coordinaciones de Protección Civil y Gestión Integral del Riesgo del Estado de México aseguraron que no será derribado ningún otro inmueble más.
A 18 días del desprendimiento de rocas de hasta 200 toneladas de peso, en la esquina de las calles Excursionistas de Chimalhuacán y Alacranes, de la segunda sección de la colonia Lázaro Cárdenas, este martes, autoridades estatales y municipales dijeron que no se derribarán más casas en la zona e hicieron un llamado a la población para no dejarse llevar por rumores de que posiblemente habrá más casas derribadas en la zona.
La alcaldía en un comunicado de prensa agregó que hasta el momento se lleva un avance del 90 por ciento en trabajos de mitigación de riesgo en la ladera y que, en los próximos días, se podría reducir el polígono de seguridad de un radio de 200 a 50 metros cuadrados a la redonda de la zona del desgajamiento; pero hizo un llamado a la población de no acercarse a la zona donde se realizan los trabajos porque prevalece el riesgo aún.
El gobierno de Tlalnepantla recordó que el 25 de septiembre entregó el primer apoyo mensual de cinco mil pesos, resta diez mil, que dará a las familias desalojadas para que puedan cubrir el pago de la renta de una vivienda hasta el 31 de diciembre de este año, cuando concluye la gestión del actual alcalde Raciel Pérez Cruz.
Reiteraron que los habitantes desalojados que elementos de la policía municipal, de la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM), de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Guardia Nacional (GN) mantienen siete filtros de seguridad las 24 horas del día en la zona para proteger las pertenencias de las familias afectadas.
Para finalizar, se informó que los ingenieros especialistas concluyeron las labores de estabilización de la zona y la construcción del terraplén que permitió a la maquinaria llegar a la pared de la ladera, donde se tiene identificada una falla de alto riesgo para iniciar con el derrumbe controlado.
El ejército y las policías mantienen siete filtros de seguridad las 24 horas del día en la zona para proteger las pertenencias de las familias afectadas.
