IMPULSO/Teodoro Rentería Arróyave
EL DESEMPLEO EN MÉXICO
BOSQUE REAL, HUIXQUILUCAN, ESTADO DE MÉXICO. Sin dejar de reconocer que las cifras del empleo han mejorado, es de aceptarse que hay tareas que merecen de los mayores esfuerzos de los gobernantes para revertir este problema lacerante.
Lo anterior aseveración se desprende de los indicadores que nos alertan sobre el llamado empleo informal, en el que se han refugiado millones de mexicanos; a ello debemos de agregarle los que no trabajan, es decir los desempleados, que ha bajado su porcentaje en décimas de punto porcentual, pero que sigue siendo un problema toral.
Las cifras dadas a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, INEGI, son incuestionables, no dan lugar a dudas, por ello está será uno de los más urgentes retos a enfrentar por el nuevo gobierno de izquierda que encabezará en 72 horas Andrés Manuel López Obrador al convertirse en Presidente Constitucional de nuestro México.
Los indicadores de ocupación y empleo con cifras oportunas a octubre de 2018, de las que informa el INEGI de acuerdo a los principales resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, ENOE, para octubre de 2018, nos revela:
La Tasa de Desocupación, TD, que se refiere al porcentaje de la Población Económicamente Activa, PEA, que no trabajó siquiera una hora durante la semana de referencia de la encuesta pero manifestó su disposición para hacerlo e hizo alguna actividad por obtener empleo, fue de 3.2 por ciento a nivel nacional, proporción inferior a la del mes previo. En su comparación anual, la TD disminuyó en octubre de 2018 frente a la de igual mes de 2017 a 3.2 contra 3.4, con datos ajustados por estacionalidad.
Sobre la Tasa de Desocupación Nacional a octubre de 2018, el INEGI reconoce que la Tasa de Subocupación -referida al porcentaje de la población ocupada que tiene la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo de trabajo de lo que su ocupación actual le demanda-, representó el 6.6 por ciento. En su comparación anual, esta tasa fue menor a la del mismo mes de 2017 que se ubicó en 7.0 por ciento.
Mientras la Tasa de Informalidad Laboral -proporción de la población ocupada que es laboralmente vulnerable por la naturaleza de la unidad económica para la que trabaja, con aquellos cuyo vínculo o dependencia laboral no es reconocido por su fuente de trabajo-, fue de 55.3% en el décimo mes de 2018, cifra inferior a la reportada en septiembre pasado, y menor en (-)1.5 puntos respecto a la de igual mes de 2017.
La Tasa de Ocupación en el Sector Informal -que se refiere a la proporción de la población ocupada en unidades económicas no agropecuarias operadas sin registros contables y que funcionan a partir de los recursos del hogar o de la persona que encabeza la actividad sin que se constituya como empresa-, representó el 27.1% en octubre del año en curso, proporción menor a la observada en el mes anterior que fue de 27.4%, y mayor en 0.3 puntos frente al del mismo mes del año pasado.
Finalmente en octubre de 2018, el 59.3 por ciento de la población de 15 años y más en el país se ubicó como económicamente activa, Tasa de Participación.
Todo lo anterior nos indica que casi la mitad de la población no cuenta con un empleo seguro, que se encuentra en la informalidad o de plano no trabaja.
Ese es el reto más importante del nuevo gobierno que se inaugura el inminente 1 de diciembre y que encabezará el político de izquierda, Andrés Manuel López obrador.
