AMLO dictó la agenda
Teodoro Rentería Arróyave
Terminado el debate, adelantamos para radio: Andrés Manuel López Obrador volvió a dictar la agenda en el Segundo Debate Presidencial, mientras Ricardo Anaya Cortés y José Antonio Meade Kuribreña perdieron la oportunidad de rebasar al puntero por repetir sus ataques entre ellos y ambos dos contra el propio candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia”.
En efecto, todos los puntos de López Obrador, que son los básicos de su campaña de años, desde que por primera vez se subió a la contienda presidencial, como son, entre otros: la corrupción, de la que culpa a “la mafia del poder”; la pobreza, abatirla con el crecimiento de la economía con base a devolverle al campo su dinamismo, recuperar la industria energética pues es intolerable que importemos los combustibles que provocan los “gasolinazos; el problema de la migración, que propone solucionarla con el abatimiento de esa pobreza que nos lacera y englobar en el problema a los países centroamericanos y caribeños que son expulsores de miles de seres humanos en busca de mejores condiciones de vida.
Sobre la desigualdad social, aumento a los salarios, como lo exigen los gobiernos de Estados Unidos y Canadá; el crimen organizado y el narcotráfico, enfrentarlo con inteligencia y también arrebatarle a los cárteles a los jóvenes y a las familias que hoy se ven obligados a sembrar amapola para sobrevivir, con educación y nuevas oportunidades de trabajo.
Seguramente con mejores frases, los candidatos de las coaliciones “Todos Por México” y “México al Frente”, se ajustaron a la agenda que desde un principio marco AMLO.
Y luego vinieron los ataques al puntero, como lo habíamos supuesto. Fue tal la desesperación, sobre todo de Anaya, quien como “gallito de pelea de barrio”, se le plantó de frente al morenista, y llegó al colmo de la insensatez al exhibir distintas portadas de la Revista Proceso para defender sus alegatos. Lo que no se vale es que haya mutilado una de las portadas en la que en su cintillo original se lee: “El Frente de Anaya también recluta fichas negras”.
Por cierto muy mal los conductores, se pasaron de protagónicos, se pasaron de “lanzas”. Las mesas de análisis transmitidas después del debate se convirtieron en postdebates, puesto que en las mismas había un representante de cada uno de los candidatos; salvo dos o tres que no cayeron en el absurdo, nos dieron puntos de vista frescos y oportunos.
Qué sucedió, que cada uno de los representantes vio como ganador su candidato patrón o jefe, de ahí que nos remitamos a la encuesta telefónica inmediata que realizó SDPnoticias. Sus resultados son los siguientes: De acuerdo con la agencia Opinión Pública Imagen y Marketing, el candidato de Morena fue considerado como el ganador del debate por 37 por ciento de los ciudadanos consultados. En segundo lugar el panista Ricardo Anaya, con el 28 por ciento, seguido por José Antonio Meade, con 27 por ciento.