IMPULSO/Teodoro Rentería Arróyave
TINA EN EL ÉTER ETERNO
Enedina Rodríguez Sosa, la queridísima “Tina”, después de enfrentar con entereza y firmeza al destino en una lucha desigual ante la enfermedad, etapa en la que renovó su carácter indomable como dejó constancia en el trayecto de su vida y en las batallas profesionales y gremiales, este triste sábado 13, emprendió el viaje al éter eterno.
Como la recordaron varios colegas, Tina fue una de las fundadoras de nuestra Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, siempre entregada a nuestro ente gremial, que integramos colegas-amigos-hermanos, y, no obstante apremios económicos, siempre estuvo en el esfuerzo para asistir a nuestras reuniones y convivir con todos nosotros, con los suyos.
En Guadalajara, en nuestro más reciente congreso, donde convivimos por última vez con Tina, momento que recordaremos siempre; fue una charla informal pero a la vez profunda donde renovaba su lealtad a su FAPERMEX y donde rememoramos esos años de peligros, de acechanzas en su tierra adoptiva, Chiapas.
Tina, llegada de su natal Veracruz, con otros compañeros, fue brazo derecho de otro líder quien también se adelantó al viaje sin retorno, Miguel González Alonso. Ella misma fue la encargada de darnos la noticia del deceso.
Fueron los tiempos terribles y despiadados del desgobernador, Pablo Salazar Mendiguchía -2000-2006-, quien había llegado al poder mediante una coalición de ocho partidos, su ambición, su carácter y su mentalidad de verdadero caciquillo tropical, afloraron de inmediato.
Los colegas chiapanecos, entre ellos Tina y Miguelón, cumplieron con su deber de denunciar en sus notas y artículos los excesos del gobernante, como respuesta atacó a los periodistas, unos fueron asesinados, otros encarcelados y otros más se fueron al exilio y uno de ellos murió en el extranjero.
Todos sus excesos fueron en complicidad con su procurador Mariano Herrán Salvatti, quienes además fueron acusados de las muertes de bebés en el Hospital General de Comitán.
Ambos fueron llevados a juicio y encarcelados, sin embargo por esos vericuetos de la justicia, fueron amnistiados y ahora Salazar Mendiguchía pretende regresar a la política por medio de una asociación de su creación.
Recuerdo esas reuniones, para las cuales los colegas chiapanecos, me pedían que me presentara protegido en el estado con un amparo, porque sabían que había órdenes de detenerme apenas pisara tierra chiapaneca, jamás lo intenté, el mejor escudo era el de los propios colegas. Para terminar recuerdo ese encuentro con todos los candidatos a la gubernatura del estado en el Teatro de la Ciudad, en la cual se comprometieron a respetar la libertad de prensa y la integridad de los comunicadores.
Tuvimos la oportunidad mi hijo y colega Teodoro Raúl y quien escribe, de platicar con ella vía telefónica en el hospital, cuando todavía le daban esperanzas de vida.
Así la recordamos a Tina y la seguiremos recordando: luchadora, valiente, sin perder esa sonrisa de mujer tranquila con la vida. Nos ofreció varias veces su casa, cerca de la carretera, donde los planes gremiales se alternaban con la buena bohemia de la música y la poesía. Compartimos con sus hijos, en especial con Arit León quien nos mantuvo al tanto de su salud; sus hermanos, entre ellos la distinguida colega Candelaria y demás familiares y amigos el dolor de la partida de Tina. In Memóriam.
