IMPULSO/ Teodoro Rentería Arróyave
La entrega del Cervantes (1)
Recibimos con el especial entusiasmo la invitación del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte del gobierno Español para asistir en calidad de testigos otorgantes a la entrega del Premio en Lengua Castellana “Miguel de Cervantes”, que, como sabemos, recayó en forma más que justa en el escritor catalán Eduardo Mendoza.
Les adelantamos, según la convocatoria, que será el próximo 20 de abril la entrega del “Premio Cervantes”, como genéricamente se lo conoce, a Eduardo Mendoza, autor galardonado en la edición del año 2016, ello en una solemne ceremonia que se llevará a cabo en el paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares a las 12:00 horas, presidido por “SS. MM. los reyes”, los reyes de España, don Felipe y doña Letizia.
La Universidad de Alcalá es una universidad pública ubicada en Alcalá de Henares y con campus en esa ciudad y Guadalajara. Imparte 38 titulaciones oficiales de grado, además de titulaciones oficiales de postgrado: 52 maestrías y 28 doctorados y 711 estudios propios y cursos de formación continua. Actualmente están matriculados 28.662 alumnos y ejercen 2.075 profesores. Su estructura organizativa consta de 9 facultades y escuelas, 2 centros adscritos, 23 departamentos y 10 institutos de investigación.
Nos remitimos a la historia: Aunque ya desde 1293, Alcalá contaba con un Estudio General aprobado por el Rey Sancho IV, la Universidad de Alcalá fue fundada por el Regente de España, el Cardenal Cisneros, en 1499 como proyecto educativo absolutamente novedoso. En él se conciliaban los mejores modelos de la tradición de entonces-París y Salamanca- con aquellos otros más innovadores como Bolonia y Lovaina.
El Cardenal Cisneros quiso que esta Universidad, que nacía con la edad Moderna como avanzada en España de las corrientes renacentistas y humanistas de Europa, fuera el crisol donde se educara no solo el clero regular y secular dispuesto a afrontar la reforma eclesiástica, sino también los nuevos funcionarios competentes que necesitaban los reinos de España. El éxito de aquella empresa hizo que Alcalá se convirtiera en la sede de una aristocracia universitaria que hizo posible el llamado Siglo de Oro de español.
En 1975 se establecieron en Alcalá facultades dependientes de la Universidad Complutense de Madrid, a fin de descongestionarla. En 1977, se fundó, a partir de dichos centros, la “nueva Universidad de Madrid con sede en Alcalá de Henares”.
Desde entonces, adquirió o recibió la donación de las instalaciones históricas de la universidad cisneriana, que había mantenido la Sociedad de Condueños. La Universidad de Alcalá afirma que en 1977 lo que se produjo fue que la Universidad de Alcalá volvió a abrir sus puertas o que se trató de una refundación o recuperación, para convertirse en una universidad pública. [email protected]
