IMPULSO/ Miguel A. García
Toluca
: El gobernador Alfredo Del Mazo reconoció que todavía existe una importante brecha para que los niveles medio y superior de la educación sean accesibles para todos los jóvenes.
En nuestro país, de cada 100 alumnos que empiezan su educación primaria, sólo ocho terminará el grado de educación superior con una licenciatura, deserción que es provocada la mayoría de las veces por la falta de recursos económicos y la urgencia de comenzar a trabajar, así lo advirtió el gobernador Alfredo Del Mazo al reconocer que todavía existe una importante brecha para que los niveles medio y superior de la educación sean accesibles para todos los jóvenes, pues, el día de hoy, de cada tres que inician la educación media, uno la abandonará por no tener la capacidad económica para costearla.
En el marco de la entrega de becas a estudiantes de padres migrantes dentro del programa “Por los que se quedan” de la Fundación BBVA Bancomer, el Gobernador mexiquense remarcó la importancia de sumar esfuerzos desde todos los sectores a favor de la educación ante la brecha que existe, esto cuando está comprobado, dijo, que aquellos con una educación superior pueden acceder a mejores oportunidades laborales y de percepciones económicas, así que este tipo de programas busca reconocer a los mejores alumnos, aquellos de excelencia, pero también la vocación de los padres de familia.
“Tenemos que combatir esa deserción escolar porque, además de que la tenemos en preparatoria, la tenemos a lo largo de todo el sistema educativo”, agregó.
A la fecha, se tiene una cifra 80 mil alumnos becados a nivel nacional de los cuales cinco mil 800 son del Estado de México, resaltó que, además del aliento educativo, la Fundación Bancomer también está colaborado con el Gobierno en las acciones de reconstrucción de las escuelas afectadas por el 19 de septiembre. Este apoyo deriva de la necesidad y premura de iniciar las labores, ya que la entidad mexiquense concentra una cuarta parte de las escuelas afectadas, cuatro mil 600 de ellas.
El Programa nace hace más de una década por parte del grupo bancario al detectar éste que la mayoría de los estudiantes que desertaba en México provenían de zonas expulsoras de migrantes.
El nivel de deserción de los becarios de este programa es de sólo el ocho por ciento.