IMPULSO/ Agencia SUN
Ciudad de México
Si el precio de la gasolina Magna se liberalizara hoy, su cotización promedio nacional sería de 15.54 pesos por litro, en vez de los 13.98 pesos al que se vende actualmente, informó la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece).
De acuerdo con el regulador, la estructura de precios para el combustible en México amortigua los problemas de falta de infraestructura y competencia en el transporte, distribución, almacenamiento y comercialización de las gasolinas.
A partir de 2017, el precio de las gasolinas en México entra en una nueva fase de liberalización gradual, que va a depender de las políticas que las autoridades determinen, pero que bajo las condiciones actuales tendría una cotización real mayor a 1.50 pesos.
“Con el precio liberalizado, los precios serán objeto de fluctuaciones en tiempo real asociadas con la estacionalidad del precio en el mercado de referencia de las gasolinas”, porque actualmente no reflejan las condiciones de logística que hay en cada región del país, de acuerdo con la Opinión de la Cofece en competencia y libre concurrencia para la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
En el documento afirmó que los estímulos fiscales y las cuotas complementarias evitaron mayores precios de los que se ofrecieron al público.
Por ejemplo, en agosto se vendió la Magna en 13.96 pesos por litro, pero sin el estímulo fiscal ni cuotas complementarias la cotización real pudo ser de 14.45 pesos.
Sin embargo, fuentes de la Comisión explicaron que eso no significaría que los precios tengan que subir, sino que todo depende de las reglas que fije la CRE, porque hay entidades del país que cuentan con mejores condiciones para que se liberen los precios y hay otras localidades en donde no hay infraestructura suficiente, por lo que abrir el mercado puede traducirse en fuertes aumentos y habría necesidad de que se tengan precios regulados.
En la opinión de la Comisión, con la apertura pueden registrarse fluctuaciones porque deben considerarse variables como:
Los precios del combustible tanto en el mercado nacional como en el de referencia; la disponibilidad o escasez de la logística de transporte, almacenamiento y distribución, el nivel real de impuestos —principalmente el IEPS y el IVA—, así como las condiciones que existen en el mercado.
Advirtió que “con la liberalización de los precios de expendio al público saldrán a la luz los problemas de falta de infraestructura (cuellos de botella físicos) así como necesidad de expansión, revelando el costo real de transportar estos combustibles desde centros de producción o importación hasta terminales de almacenamiento y reparto, lo que impactará el precio de venta de gasolinas al público”.
La Comisión aseveró que hay cuestiones evidentes, por ejemplo, concentración de gasolineras en seis entidades, porque 35% de las estaciones de servicio se ubican en: Ciudad de México, Estado de México, Nuevo León, Jalisco, Veracruz y Puebla, con 11 mil 444 estaciones de servicio.
Para revertir esa situación, Pemex debe hacer efectivo el acceso abierto a la infraestructura existente para transportar el combustible, conformar un mercado al mayoreo, establecer tarifas logísticas y eliminar barreras a la competencia en la cadena.
Casa de Bolsa Finamex prevé que con la liberalización de los precios, la venta de la magna será de 15.04 pesos por litro y la Premium de 15.84.
En un análisis detalló que la “liberalización del precio de la gasolina en México para 2017, obliga a considerar un impacto adicional sobre la economía mexicana al que tendremos que acostumbrarnos”, porque al ser importada la gasolina, al registrarse alza de precios del petróleo, la inflación va a subir y no se podrá cumplir con la meta de mantenerla en el rango de entre 2% y 4%.