IMPULSO/ Agencia SUN
Ciudad de México
Sophie Vanderbecken nació en Bélgica y vive en México hace 17 años. Aquí lleva a cabo varios proyectos importantes que involucran el chocolate. El primero de ellos es ser parte de la Asociación Nacional de Fabricantes de Chocolates, Dulces y Similares AC (Aschoco), con la que fomenta la producción y comercialización del chocolate mexicano.
El segundo proyecto es su taller personal, Le Caméléon, una chocolatería que promueve la cultura del cacao y chocolate. Entre sus logros está la medalla de bronce en el concurso International Chocolates Awards, America & Asia Pacific 2016, a la tableta de chocolate blanco con flor de Jamaica. Es la primera tableta mexicana de chocolate en ser premiada en dicha competencia mundial.
Sophie nos invitó a elaborar un chocolate desde que es cacao en su taller en la colonia Obrera. Aprovechamos para hacerle unas preguntas acerca de la situación del cacao en México.
¿México es chocolatero?
No tanto como antes. A pesar de ser el país en donde surgió el chocolate, el consumo per cápita de ese alimento es de 750 gramos anuales, mientras que en países europeos, como Austria o Suiza, es de 12 kilos y en algunos de Latinoamérica, como Brasil o Argentina, es de 2.5 kilos.
Eso en cuanto a consumo. En el tema de la producción estamos en el lugar 11 a nivel mundial en producción de cacao con 28 mil toneladas, muy por debajo de países como Ghana, que produce 835 mil toneladas, o Costa de Marfil, que genera mil 449 toneladas.
¿Qué se está haciendo para producir más chocolate en México?
En Aschoco estamos convenciendo cada vez más a productores para que siembren, cosechen y comercien cacao. Pueden llevarse una ganancia hasta de 3 a 1. Por supuesto cuidando siempre la calidad en todo el proceso: lo artesanal no quita lo profesional.
En cuanto a Le Caméléon, queremos combinar las técnicas de Bélgica, de donde vengo, con los sabores tradicionales mexicanos. Sus chocolates van rellenos de ingredientes como la flor de Jamaica, chipotle, chapulín, cacao criollo y mole; además cada temporada propone al público sabores nuevos.
¿Cuáles son tus siguientes proyectos?
Un libro, más y más chocolate. Queremos poner a México en el mapa del chocolate de calidad del mundo.