Opinión
IMPULSO/ Miguel A. García
Este jueves, abrió la convocatoria para el proceso de selección de rector de la Universidad Autónoma del Estado de México, para el que se contemplan tres posibles candidatos: Alfredo Barrera Baca, secretario de Docencia, Hiram Piña Libién, secretario de Rectoría, y Javier González Martínez, secretario de Administración.
De acuerdo a la convocatoria aprobada el martes de esta semana, los aspirantes tendrán que presentar su solicitud de registro por escrito ante la Comisión Especial Electoral el día 23 de febrero, en un plazo de 9:00 de la mañana a mediodía en la Sala de Rectores.
Una vez aceptado el registro, así como el plan de trabajo, se dará paso a las jornadas de promoción y comparecencias institucionales de los aspirantes, mismas que se realizarán a partir de las 8:00 horas del día 24 de febrero y hasta las 21:00 horas del día 28 de abril de 2017.
El paso siguiente será la auscultación cualitativa y se llevará a cabo en el periodo que comprende los días 19 al 21 de abril de 2017, en los horarios que acuerde la Comisión Especial Electoral del Consejo Universitario.
Finalmente, por mayoría de votos del Consejo Universitario, el día cuatro de mayo próximo, el Presidente del Consejo Universitario emitirá la convocatoria para la sesión extraordinaria, en la que la máxima autoridad universitaria elegirá a la persona que ocupará el cargo de Rector de la Universidad Autónoma del Estado de México para el periodo ordinario comprendido del 14 de mayo de 2017 al 14 de mayo de 2021.
Por lo anterior, se espera que en las próximas horas se dé la primera renuncia de los ya mencionados aspirantes para que puedan participar en la elección del próximo rector, siendo Barrera Baca el favorito hasta el momento, sin que eso signifique que se debe descartar a los otros dos secretarios mencionados.
Desde luego que la comunidad universitaria espera que sea sólo un aspirante el que renuncie a su cargo, pues prefieren un candidato de unidad a ver a la universidad inmersa en conflictos de divisionismo o pugnas que la puedan dañar.