IMPULSO/Agencia SUN
Estados Unidos
La moderna Arena T-Mobile apenas tiene tres años de inaugurada y pareciera que fue construida para que sea el recinto en el que Saúl Álvarez escribirá sus páginas más gloriosas en el pugilismo, pero la empresa que lo maneja ya planea ofrecerle otro inmueble, para que sea visto por más personas. Óscar de la Hoya, propietario de Golden Boy Promotions, adelanta que —si todo sale bien— el “Canelo” será quien encabece la primera función boxística en el nuevo estadio de los Raiders, cuya apertura está programada para agosto de 2020.
“Ya no falta mucho y claro que queremos tener una función ahí”, reconoce el Golden Boy. “El nombre de la principal figura empieza con ‘C’ (sic) [en alusión al Canelo] y sería quien pelee esa noche”.
Aunque todavía falta para eso. Después de celebrar el triunfo sobre Daniel Jacobs, el chico de la barba pelirroja y su equipo tienen que decidir quién será su rival para septiembre y en qué categoría, porque puede repetir en mediano, o bien ir a súper mediano o semicompleto.
“Hay muchas opciones. El ‘Canelo’ puede pelear en las 160, 168 o 175 [libras]”, recuerda De la Hoya. “En la Arena estuvieron (Gennady) Golovkin, Demetrius Andrade… Ya veremos qué pasa”.
Aunque el combate que más añora, en este momento, luce imposible para septiembre. Saúl ya es dueño de los cinturones medianos del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y la Federación Internacional de Boxeo (FIB); le falta el de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), en poder del estadounidense Demetrius Andrade, quien en junio lo defiende ante el polaco Maciej Sulecki, por lo que le sería imposible estar listo para septiembre, mes en el que el jalisciense volverá al cuadrilátero.
“El otro campeón va a pelear en junio, será difícil que subamos al ring en septiembre”, reconoce
