IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad De México
La octava ronda de renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que se realizaría del 8 al 16 de abril no se llevará a cabo y, en su lugar, el jueves habrá un encuentro ministerial para lograr un principio de acuerdo que incluiría el aval de México al alza de 62.5% a 85% en reglas de origen automotrices, a pesar de la oposición de la industria nacional.
Fuentes canadienses consultadas por EL UNIVERSAL dijeron que el representante comercial de Estados Unidos (EU), Robert Lighthizer, presiona para que en dos semanas más se llegue a un acuerdo en principio para modernizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Mientras tanto, habrá reuniones bilaterales, trilaterales de alto nivel, de jefes negociadores y de líderes de mesas temáticas, ya sean presenciales, por internet o por teléfono.
A la intención del gobierno estadounidense de avanzar lo más pronto posible a un acuerdo se suma el gobierno mexicano, el cual también ejerce presión para llegar a convenios antes de las elecciones presidenciales, dijo la fuente.
La “ventana de oportunidad” para avanzar en las negociaciones ya está abierta y “podría” haber posibilidad de cerrarlas en tres semanas, dijo el coordinador del grupo negociador del sector privado, también llamado cuarto de junto, Moisés Kalach.
En reglas de origen, EU decidió retirar la demanda de que 50% del contenido regional de un vehículo sea exclusivamente de dicho país, pero la presión radica ahora en cómo se incrementará la regla de origen de 62.5% a 85%, dijo la consultora y especialista en comercio exterior de la firma LMM Consulting, Luz María de la Mora.
La propuesta actual es hacer más fuerte la lista de rastreabilidad, pero muchos insumos no se producen en ninguno de los tres países.
Según las restricciones que se impongan y del periodo de transición, la regla podría ser impráctica y llevar a las armadoras a exportar los autos pagando un arancel de 2.5% en lugar de hacerlo con la tasa cero del TLCAN, dijo De la Mora.
La fuente canadiense expuso que si bien existe la propuesta de su país de incluir investigación, desarrollo y propiedad intelectual para alcanzar ese porcentaje, los estadounidenses quieren incluir un índice salarial que afectaría a México.
Para avanzar en los acuerdos, ayer a las 9:59 horas el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, llegó a las oficinas de
Robert Lighthizer, acompañado por la plana mayor del equipo negociador mexicano.
Lo hacía “preparado para dialogar y encontrar soluciones”, reiterando la posición de la delegación mexicana de que “desde el día que nos sentamos en la mesa hemos visto futuro” a las negociaciones sobre el TLCAN. “Si no, no estaríamos sentados a la mesa”, reflexionó.
Unas dos horas después se unió a las pláticas el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray Caso, así como el embajador mexicano en Washington, Gerónimo Gutiérrez, y el asesor principal y yerno del presidente estadounidense, Jared Kushner.
Después de siete horas y 49 minutos de reunión, Guajardo abandonó la oficina a toda prisa.
“Como todo, siempre hay avances. Esperemos que se den los suficientes”, dijo Guajardo en exclusiva a EL UNIVERSAL mientras subía al vehículo oficial de la embajada. Lamentó “no poder compartir nada” sobre detalles de cómo se estaban desarrollando las negociaciones.
En el aire sigue que se produzca una octava ronda de negociaciones, que por el momento está cancelada de manera extraoficial.
“Eso es independiente, la ministerial está por encima de las rondas”, se limitó a decir Guajardo.
Previamente a la reunión ministerial prevista para mañana, hoy la ministra de exteriores canadiense, Chrystia Freeland, visitará también a Lighthizer, en lo que consideró “un momento decisivo”.