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Brasil
El Tribunal Supremo de Brasil aprobó éste martes la extradición a Italia del histórico capo mafioso Pasquale Scotti, que estaba fugitivo desde hace 24 años y fue arrestado el pasado mayo en la ciudad de Recife, en el noreste del país.
La decisión del Supremo, que deberá ser refrendada por la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, depende de que el Gobierno italiano se comprometa a aplicarle a Scotti una condena de hasta 30 años de cárcel, el máximo castigo que aplica el Código Penal brasileño, según la corte.
Scotti fue condenado en rebeldía en Italia a cadena perpetua en 1991 por su participación directa en 22 asesinatos cometidos entre 1982 y 1983, aunque se encontraba prófugo de la justicia desde 1986.
El italiano vivía en Recife, capital del estado de Pernambuco, desde hace años bajo el nombre falso de Francisco de Castro Visconti y tiene dos hijos brasileños.
En su defensa, Scotti alegó que es un “perseguido político” y que huyó de Italia porque corría riesgo de ser ejecutado en la cárcel y además alegó motivos “humanitarios” puesto que si es extraditado no podrá participar en la educación de sus hijos, argumentos que fueron rechazados por el Supremo.