IMPULSO/ Agencia SUN
Columbus, EU.
Recargados levemente en su historia reciente contra México, pero sin vivir de ella, la selección de los Estados Unidos se dijo confiada para encarar y derrotar a los tricolores.
Porque “Columbus, es Columbus”, sentencia su capitán Michael Bradley
“Este es un juego especial para mí. En el 2009 anoté dos goles, los tengo bien presentes pero eso no quiere decir que vayamos a ganar”.
Columbus pesará, “Columbus es Columbus, aquí ejercemos mucho respeto, la gente nos apoya mucho”, sostuvo.
“Lo pasado queda para los que les gustan las estadísticas. Nosotros, este equipo quiere escribir nuestra historia”, añade. El equipo estadounidense entrenó en una de las canchas del Columbus Crew bajo una temperatura de 3 grados.