IMPULSO/ Agencia SUN
Ciudad de México
Después de dos años de mejoría en los salarios reales de la población, el impacto del aumento en las gasolinas a partir de enero próximo va a provocar que disminuyan en 2017, estimó BBVA Bancomer.“El nuevo aumento previsto para la inflación, tras el anuncio de mayores precios de la gasolina, tendrá un impacto sobre los salarios reales que, luego de aumentar durante 2015 y 2016, volverán a decrecer en 2017. El aumento de los últimos dos años había sido uno de los pilares de la fortaleza del consumo privado, por lo que la previsible peor evolución de los mismos para 2017 impone un nuevo reto para su dinamismo”, dijo la firma.
En un análisis sobre el impacto del alza de las gasolinas, BBVA Bancomer declaró que la inflación se mantendrá por encima de 4% en 2017, alcanzando un pico de 5% en julio y descenderá hasta el cuarto trimestre del año próximo para ubicarse en 4.65% al cierre de 2017.
“El aumento de precios anunciado implicará un aumento adicional de más de seis décimas en la inflación de enero. Con ello, ahora prevemos que la inflación de enero será de 1.1%, es decir, incluso mayor que la observada tras la reforma fiscal de 2014 cuando se ubicó en 0.9%”, de acuerdo con BBVA Bancomer.
En opinión del banco, el ajuste anunciado en los costos de los combustibles incorpora los precios de referencia internacionales, pero también tiene en cuenta la cotización del transporte, logística y distribución. “Seguramente esta medida va en parte encaminada a apuntalar las finanzas de Pemex, al trasladar a los precios finales de la gasolina los costos reales de su distribución, por ello, también la decisión de dividir en 90 regiones diferentes los precios máximos de la gasolina”, dijo.
“Los aumentos en los precios de las gasolinas anunciados intentan eliminar el subsidio que existía en el energético. Esto significará que los precios se eleven por encima del promedio internacional, puesto que la estructura de los precios de producción y distribución que hoy existe en México es mayor a la que se tiene en otros países. Esta estructura de costos tenderá a eficientarse gracias a la reforma energética”, añadió.
Para BBVA Bancomer, el ajuste en la estructura de precios de las gasolinas es adecuado, puesto que es preferible que los mayores precios derivados de la ineficiente estructura de costos de los combustibles en México los enfrenten los consumidores a que lo haga el fisco. “Si los absorbiera el gobierno, se trataría de una política regresiva y no ecológica”, finalizó.