IMPULSO/ Alejandra Barrales
(Maestra en políticas públicas)
La Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres (AVGM) es un mecanismo innovador en América Latina y es considerado una herramienta de protección de los derechos humanos de las mujeres único en el mundo, pero que a 12 años de su creación no ha cumplido con su objetivo, la adopción de medidas para responder a la situación de emergencia que viven las niñas, adolescentes y mujeres a lo largo del territorio nacional, por el simple hecho de ser mujer.
Nuestro marco jurídico se ha robustecido, pero no ha sido suficiente para obligar a las autoridades a actuar de forma pronta y expedita en la protección de la integridad y vida de las niñas, adolescentes y mujeres. Es preocupante el aumento progresivo de la violencia feminicida, cerraremos 2019 con una tendencia al alza en las estadísticas, que arroja que cada dos horas y media le es arrebatada la vida a una mujer.
Todos los días conocemos de casos de feminicidios en los que se evidencia que las instituciones de administración y procuración de justicia han sido la primera barrera de acceso a la justicia para las víctimas, siendo la violencia institucional contra las mujeres la constante, lo cual debe cambiar.
El nulo avance de las investigaciones han contribuido para que a lo largo del territorio nacional ser mujer sea un peligro de muerte.
En México hay 410 municipios en 19 entidades con declaratorias de alerta por violencia de género, mecanismo que no ha logrado frenar la violencia feminicida. De enero a octubre del año en curso se registraron 809 feminicidios, reporta el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Las entidades que registran mayor número de feminicidios son Veracruz, con 147 casos, le sigue Estado de México, con 95; Nuevo León, con 58; Puebla y Ciudad de México, con 50 casos cada uno.
El mecanismo ha sido esencial en la reflexión sobre los temas de violencia contra las mujeres. Su gran aporte, poner atención en los estados y en los municipios donde más violencia ha habido, lo que ha significado la oportunidad para que la sociedad civil colocara el tema ante las autoridades y en los organismos internacionales.
Importante resulta la reforma que se hizo hace unos días a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, para fortalecer el mecanismo AVGM, hacerlo efectivo y que transforme la situación de emergencia que se vive en materia de violencia feminicida.
Es importante que se eleven a rango de ley las directrices y procesos a seguir para solicitar, emitir y dar atención a la Alerta de Violencia de Género.
Fundamental que se establezcan como principios rectores para el acceso de todas las mujeres a una vida libre de violencia, observar el respeto y la dignidad, los derechos humanos y la debida diligencia.
Se establece la conformación de un Comité de Expertas en derechos humanos, justicia, perspectiva de género, sociología y antropología; y que se le deberá destinar una partida presupuestal.
Nos anima que en el Comité de Selección del Comité de Expertas se incluya a la representante en México de ONU Mujeres; en tanto que en el Comité de Expertas se considere la voz de las organizaciones y colectivos de la sociedad civil, sin cuyo trabajo no se hubiera llegado a una reforma, que busca cerrar el espacio a la discrecionalidad y omisiones de los servidores públicos.
Las recientes movilizaciones de mujeres son una expresión de hartazgo de las mujeres, son movimientos legítimos, consecuencia de muchas omisiones y casos de negligencia e impunidad que se han visibilizado desde las redes sociales.
La situación de emergencia en materia de seguridad cruza todo el territorio nacional, nos atraviesa a todas las personas pero de forma más atroz a las niñas, adolescentes y mujeres, por ello debemos redoblar esfuerzos para que ser mujer deje de significar vivir en riesgo, con miedo, desventaja y perder la vida.
Twitter: @Ale_BarralesM