IMPULSO/ Miguel Á. García
Toluca
De cara a consolidar un protocolo de seguridad para periodistas en el estado de México, el miércoles, autoridades del gobierno estatal e integrantes del grupo de periodistas “ALTO A LAS AGRESIONES, NO QUEREMOS PERIODISTAS ASESINADOS EN EDOMEX”, acordaron el desarrollo de foros regionales para identificar los principales requerimientos para el ejercicio de la libertad de prensa.
Estos encuentros se deberán realizar en la última semana de julio con la participación u opinión de comunicadores para que en el mes de agosto se realicen reuniones regionales entre la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Secretaría de Justicia y derechos Humanos, Comisión de los Derechos Humanos, Coordinación de Comunicación Social y los periodistas, en la elaboración final del protocolo de seguridad y protección a la labor periodística.
Este a su vez deberá ser bajado a las autoridades municipales, que se reconoce, son las que encabezan las agresiones y atentados a la libre expresión.
“Es responsabilidad de dos, de los funcionarios de no agredir, pero también de los periodistas de respetar, si hay protocolos de seguridad para evitar no contaminar la escena de un crimen o accidente, si un periodista insiste en entrar y tomar fotografías no se le debe permitir porque contaminamos la escena del crimen, hay lugares en donde si tenemos acceso y otros lugares donde se va restringir es un trabajo de ambas partes” declaró Adriana Tavira, periodista.
Otra de las propuestas que busca concretar el gremio periodístico es la creación de una Fiscalía especializada de atención a periodistas.
“Es importante contar también con una fiscalía de atención que te acompañe a todo lo que tienes que realizar si eres agredido y esto es el asesoramiento jurídico hacia un periodista que fue agredido”
En días pasados 250 periodistas del Estado de México suscribieron una carta en la que demandaban mayores condiciones de seguridad para el desarrollo de su actividad, y un mayor compromiso de los gobiernos estatal y locales. En lo que va del año en la entidad se reportan al menos 10 agresiones hacia reporteros y comunicadores.