IMPULSO/ Agencia SUN
CIUDAD DE MÉXICO
El pleno del Senado aprobó la reforma a la Ley General de Salud en materia de sobrepeso, obesidad y de etiquetado de alimentos y bebidas no alcohólicas, con la cual se advierte sobre los productos que excedan los límites máximos de contenido energético, azúcares añadidos, grasas saturadas, sodio y demás nutrimentos críticos.
El dictamen señala que con un etiquetado eficaz se permitirá a los consumidores tomar decisiones respecto a su alimentación, a fin de que puedan elegir y comparar productos de una misma categoría, pero más saludables.
El documento –avalado con 114 votos a favor y dos abstenciones– señala que el etiquetado frontal de advertencia deberá hacerse en forma separada e independiente a la declaración de ingredientes e información nutrimental, para indicar los productos que excedan los límites máximos de contenido energético, azúcares añadidos, grasas saturadas, sodio y los demás nutrimentos e ingredientes.
Las modificaciones a la Ley General de Salud establecen que las etiquetas o contra etiquetas para los alimentos y bebidas no alcohólicas deben ser de fácil comprensión, con información veraz, directa, sencilla y visible. La Secretaría de Salud podrá ordenar la inclusión de leyendas cuando lo considere necesario.
“Se define como nutrimentos críticos a aquellos componentes de la alimentación que pueden ser un factor de riesgo de las enfermedades crónicas no transmisibles”, se lee en el dictamen que se envió al Ejecutivo para su publicación.
El documento resalta que en México, siete de cada 10 adultos y tres de cada 10 niños de entre cinco y 11 años padecen sobrepeso, así como 35% de los adolescentes de entre 12 y 19 años, y que de seguir en esta tendencia, uno de cada dos niños desarrollará diabetes a lo largo de su vida.
El presidente de la Comisión de Salud, Miguel Ángel Navarro (Morena), sostuvo que en México la obesidad mata más gente que el tabaco, pues ocho de cada 10 decesos en el país son provocados por padecimientos derivados del sobrepeso y la obesidad, además de que en México cada año se registran más de 80 mil muertes asociadas a la diabetes.
“Si continuamos con esta pandemia, vamos a tener una generación de niños que podrían morir antes que sus padres a causa de enfermedades como la diabetes y las cardiopatías”, asentó.
La senadora Noemí Reynoso (PAN) dijo que si bien votarán a favor, es preciso señalar que para que funcione hacen faltan programas de educación y alimentación para combatir la obesidad.
“No es un proyecto innovador de etiquetado porque no coincide con las características de alimentación de nuestros país, de las familias mexicanas, y creemos que el etiquetado no es una solución al problema de la obesidad, hay que trabajar en políticas públicas para que las familias y empresas aprendan hábitos alimenticios. Lo importante es saber cuándo, cómo y qué comer, porque eso no lo hacen las etiquetas”, expresó.
Por Movimiento Ciudadano, la senadora Patricia Mercado indicó que esta legislación va en el camino correcto para garantizar el derecho a la salud de los ciudadanos, “es deber del Estado asegurar que el mercado no ofrezca productos y servicios dañinos para las personas”, agregó.
Nuvia Mayorga, del PRI, aseguró que los legisladores tienen la responsabilidad de procurar un etiquetado claro y funcional, a fin de revertir la crisis de obesidad que afecta la vida de miles de familias mexicanas, por lo que su atención debe convertirse en una prioridad para gobierno, industria y consumidores.
“Estoy segura de que es más conveniente lograr que la población adopte estilos de vida más saludables si cuenta con información clara en los etiquetados. Los legisladores debemos garantizar el pleno derecho a un etiquetado frontal con información clara que permita a los consumidores tomar decisiones informadas respecto a su alimentación”, puntualizó.
Juan Manuel Fócil (PRD) mencionó que hace falta una cultura ciudadana sobre la alimentación nutritiva, y pidió que las instancias de gobierno realicen un seguimiento estricto de los resultados en hábitos de consumo, para conocer si cumple su cometido el etiquetado.
Las nuevas modificaciones
Con esta reforma a la Ley
General de Salud ahora se advertirá en el etiquetado sobre aquellos productos que excedan los límites máximos en azúcares, grasas y sodio.
La advertencia tendrá que ir en la parte frontal y será independiente de la información nutrimental convencional.
Tendrá que ser información de fácil comprensión, veraz, directa, sencilla y visible.
El Senado aseguró que con esta medida los consumidores podrán tomar decisiones más saludables en sus compras.
Morena indicó que es un dictamen para evitar una generación que podría morir antes que sus padres debido a enfermedades relacionadas con la obesidad.