Gobiernos no deben permitir que medidas restrictivas por el Covid-19 generen mayor violación a derechos de las mujeres, señala investigadora de UNAM, Claudia Díaz Olavarrieta
Guadalupe Rosas Suárez
Las medidas de aislamiento para evitar la propagación del virus, sumada a la tensión en los hogares generada por el desempleo o subempleo, aumentó el riesgo de violencia intrafamiliar y de género incluso en el ambiente laboral, siendo el impacto más severo contra las mujeres.
Para muestra un botón. En un año, aumentó en 167% el número de quejas por violencia de género iniciadas en la Visitaduría especializada de Igualdad de Género de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México, pues en 2019 se registraron 52 quejas; pero en el 2020, la cifra pasó a 139.
No obstante, la tendencia es al alza, pues en el 2018 esta instancia recibió sólo siete quejas; en 2019, fueron 52; en 2020, se iniciaron 139 y, en lo que va del presente año, al cierre de abril se tiene un registro de 51.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México es la dependencia que registra más quejas; siendo las principales causas: el derecho a la dignidad, a no ser sometido a acoso laboral, a la protección contra toda forma de violencia; así como a una adecuada administración y procuración de justicia.
En lo que corresponde a lo que se vive en casa, de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares, en México, del total de mujeres casadas o unidas, 40% ha sufrido uno o varios tipos de violencia conyugal a lo largo de su vida y el contexto de la pandemia ha agravado esta situación.
Las investigadoras Claudia Díaz Olavarrieta y Vivian Phillips de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México, coincidieron en señalar que los gobiernos no deben permitir que las circunstancias extraordinarias que estamos viviendo y las medidas restrictivas contra el Covid-19 generen una mayor violación del derecho de las mujeres a una vida libre de violencia, como lo recomienda la propia Organización de Naciones Unidas (ONU).
El Instituto Nacional de las Mujeres señala que la violencia hacia las mujeres en el marco de las relaciones de pareja es un problema muy importante que se agrava ante la necesidad de permanecer en confinamiento en los hogares. En hogares ampliados o compuestos, también aumenta el riesgo de violencia sexual entre las niñas y jóvenes.
En su estudio titulado “Covid-19 y Violencia Basada en Género/Violencia Intrafamiliar”, se destaca que también se ha visto que el coronavirus golpea tres veces más a las mujeres: por los efectos en la salud consecuencia del virus, por la violencia intrafamiliar y porque las mujeres son lasencargadas del cuidado de la familia.
En México, el Instituto Nacional de las Mujeres ha hecho un llamado para prevenir la violencia contra las mujeres y reconocer que ante la puesta en marcha de las medidas destinadas a contener la pandemia del Covid-19, debemos reconocer que este fenómeno tiene impactos diferenciados para las mujeres y las niñas que pueden resultar en mayores índices de violencia. Por esta razón es necesario que las instituciones dedicadas a prevenir, atender y sancionar la violencia contra las mujeres, refuercen sus medidas de información y de actuación en el marco de sus competencias para mitigar la violencia de género.
Del total de mujeres casadas o unidas, 40% ha sufrido uno o varios tipos de violencia conyugal, revela la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares, en México,