IMPULSO/ Agencia SUN
Ciudad de México
Aceptar sin leer los términos y condiciones de cualquier servicio online representa un problema grave. Para demostrarlo, la compañía británica Purple, que suministra acceso gratuito a internet a compañías como Lego, Outback Steakhouse y Pizza Express, realizó un curioso experimento en el que participaron cerca de 22 mil personas.
Durante dos semanas se añadió una cláusula de términos y condiciones de servicio; que al ser aceptada por los usuarios se comprometían a realizar mil horas de trabajos comunitarios como limpiar excrementos de animales en parques locales, desatascar tuberías manualmente, limpiar letrinas portátiles en conciertos y festivales, despegar chicles de las aceras y hasta algunas más amables como abrazar perros y gatos callejeros y decorar cáscaras de caracoles.
Dichas actividades aparecían explícitamente en la cláusula, pero como Purple esperaba, nadie se detuvo a leerla.
La compañía hizo saber a sus clientes que no planea hacer válida la realización de estas actividades, pero sí busca generar conciencia para que en el futuro se tome en serio la lectura de todo aquello que requiere una firma.
General Data Protection Regulation (GDPR) es una iniciativa europea que busca que las compañías simplifiquen sus términos y condiciones para que haya una mayor transparencia con los clientes. Purple se sumó a esta inciativa, que será obligatoria a partir del 25 mayo de 2018.