IMPULSO/ Miguel A. García
Toluca
Cada incapacidad injustificada expedida por médicos familiares del Instituto Mexicano de Seguro Social (IMSS) cuesta dinero tanto a la institución como a la empresa, es por ello que las sanciones fueron endurecidas, en especial para los médicos que sean detectados realizando estas prácticas.
De acuerdo a Enrique Gómez Topete, delegado del IMSS en la zona poniente del Estado de México, las incapacidades injustificadas continúan siendo el dolor de cabeza de la institución, en especial los lunes, viernes, puentes y los días festivos.
“Por azares de la vida, quién sabe por qué la naturaleza marca que cuando toca puente se incrementan las incapacidades y el turismo hospitalario”, recriminó de manera sarcástica el funcionario. Detalló que, cuando se ha detectado que médicos incurren en alguna falta, se les hace un extrañamiento, por lo que al tercero van fuera.
“Es como en las piñatas, ya le diste una, ya le diste dos, ya le diste tres y tu tiempo se acabó. Este año, se ha sancionado aproximadamente a 20 médicos de todo el estado, aunque ninguno ha reincidido”.
Una de las sanciones que reciben los médicos que expiden estas incapacidades injustificadas es que parte de su aguinaldo se ve disminuido dependiendo de la gravedad, aunque, a la fecha, ninguno se ha hecho acreedor a esta sanción.
Descartó que esta situación sea particular de alguna unidad médica familiar.
“Los mismos derechohabientes saben, y cuando se les niega en una clínica, hacen lo que decimos que es turismo hospitalario”, fustigó el funcionario federal.
“Se les hace fácil también a las empresas echarle la culpa al Seguro Social de que se reparten las incapacidades a diestra y siniestra como si fueran cartas de póker, pero todo ya en el México actual es una corresponsabilidad”, finalizó.
DATO:
En lo que refiere a los pacientes, comentó que todas las incapacidades tienen nombre de quien la pide y quien la expide.