IMPULSO/ Agencia SUN
Ciudad de México
La inseguridad es un problema latente cuya principal causa es la falta de educación y la pérdida de valores, concluyeron los 376 jóvenes que participaron en el Programa de Ciudadanía de Scholas Ocurrentes, organización internacional fundada por el papa Francisco.
Ante el gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, los 376 jóvenes de 50 escuelas mexiquenses tanto públicas y privadas, que participaron en el programa, leyeron las conclusiones a las que llegaron durante una semana de trabajo en la que analizaron los problemas en su entorno, siendo la inseguridad y la discriminación las problemáticas que más los afectan.
“La inseguridad es un problema latente en el Estado de México, por esa razón se ha analizado este tema en profundidad y se ha llegado a la conclusión de que una de las principales causas es la deficiencia en el sistema educativo”, indicaron los jóvenes en el documento que elaboraron.
Para elaborar el diagnóstico en materia de inseguridad, los jóvenes encuestaron a 300 ciudadanos del Estado de México, con el objetivo de conocer la percepción de la inseguridad entre los ciudadanos, dicha encuesta arrojó que 9 de cada 10 mexiquenses se considera inseguro al Estado de México, mientras que el 60% de los encuestados ha sufrido algún hecho delictivo en el período 2016-2017, sin embargo, el 48% de las víctimas no denunciaron por desconfianza a la justicia o por temor a represalias.
En la Escalinata del Calvario, dos comisiones, de ocho jóvenes cada una, dieron lectura a las propuestas que elaboraron para atender esta situación, cómo es fortalecer las instituciones policiacas y la creación de programas educativos en los que se inculquen valores desde la niñez hasta la educación, así como promover la participación de la ciudadanía en los problemas que afectan su entorno.
En cuanto al tema de la discriminación, los jóvenes consultaron a especialistas en el tema y realizaron encuestas, así como consultas vecinales, con lo que concluyeron que la educación “basada en el encuentro con otros” es fundamental para resolver la discriminación.
Los jóvenes propusieron impulsar la capacitación de los profesores en materia de discriminación así como impulsar una materia de prevención y tratamiento de acoso escolar.
Ante los planteamientos de los jóvenes, el gobernador Eruviel Ávila Villegas, afirmó que el Gobierno Mexiquense está abierto a recibir todas las propuestas emanadas del Programa de Ciudadanía de Scholas Ocurrentes.
“Nunca van a ser suficientes las patrullas, policías, armas si no le apostamos a fortalecer los valores de principios que se van perdiendo. Hay que apostarle a la educación, a la cultura, al arte”, dijo.
José María del Corral, presidente mundial de la organización Scholas Ocurrentes, reconoció que no es fácil para las autoridades estar frente a los jóvenes que expresan sus demandas, expresó que los jóvenes que participaron en el Programa de Ciudadanía, han puesto el ejemplo de que la solución ante los problemas son los puentes, no los muros.
“He visto las ganas, el encuentro y creo que no es casual que esta experiencia haya nacido justo aquí en este lugar de México en este corazón de México. Chicos de todas las comunidades con sus sentimientos han levantado la Bandera de México diciendo que la solución nunca serán los muros sino los puentes”, indicó.
Al término del evento se sembró en la Escalinata del Calvario un olivo, árbol que el papa Francisco ha sembrado en diferentes partes del mundo como símbolo de la paz.
Al evento asistieron Carolina Monroy, secretaria general del PRI; Ana Lilia Herrera Anzaldo, secretaria de Educación del Estado de México; Héctor Sulaimán Saldívar, presidente del Consejo Asesor de Scholas México; David López Cárdenas, presidente municipal de Metepec, así como representantes de distintos credos religiosos.
Scholas ciudadanía es uno de los ocho programas de Scholas Ocurrentes, organización fundada por el papa Francisco en agosto de 2013.
Scholas Ocurrentes trabaja con escuelas públicas y privadas, integra a varias religiones a fin de “derribar muros” entre culturas para la construcción de propuestas que ayuden a los gobiernos a promover una educación con valores para enfrentar problemas como la violencia, discriminación y desintegración.
