IMPULSO/ Edición Web
Bogotá
Un sismo de magnitud 5.6 sacudió la región suroeste de Colombia y se sintió con fuerza en la capital del país, lo que llevó a empleados de oficinas a evacuar sus edificios por precaución y forzar el cierre del principal aeropuerto.
El movimiento tectónico se centró en el departamento del Huila, a unos 300 kilómetros al suroeste de Bogotá. Tenía una profundidad de 37 kilómetros (23 millas), según el Servicio Geológico de Estados Unidos.
El presidente Juan Manuel Santos informó que no hubo informes inmediatos de daños.
El aeropuerto de Bogotá suspendió los vuelos durante unos minutos pero volvió a abrirse después de que las autoridades inspeccionaron la pista y determinaron que no había sufrido daños.
El alcalde de Bogotá Enrique Peñalosa pidió calma porque los empleados de oficina asustados tardaron en regresar a edificios de gran altura que han proliferado en la capital de ocho millones de habitantes en los últimos años sin ninguna prueba importante de su fortaleza estructural.
”Las normas sísmicas en Bogotá son muy estrictas y pueden soportar un terremoto muy fuerte”, aseguró Peñalosa mientras inspeccionaba en la Plaza Bolívar en el centro de Bogotá.
Alberto Cárdenas Arenas, un contador de 28 años, dijo a The Associated Press que sintió el sismo cuando caminaba a su oficina en el norte de Bogotá. ”Sentí un gran ruido y duro como si hubiera pasado un camión pesado. Me dio mucho miedo”, aseguró.
Fue el mayor sismo que afectó a Colombia desde un temblor de magnitud 5.9 en septiembre pasado.
Medios locales informaron que el aeropuerto de Bogotá suspendió los vuelos para determinar si la pista estaba dañada.
Colombia es un país sísmicamente activo con un gran potencial de daño debido a su terreno montañoso y su ubicación a lo largo del anillo de fuego del Océano Pacífico. (Diario.mx)