IMPULSO/ Ernesto Hernández Alarcón
Una sana derrota
Sólo tres partidos más restan en el calendario regular de la NFL, en esta reciente jornada, lo más relevante fueron los partidos perdidos de los dos equipos “revelación” del presente año: los Raiders de Oakland y los Vaqueros de Dallas.
La pregunta obligada respecto a los Raiders de Oakland es la siguiente: ¿los Jefes de Kansas City revelaron a un equipo sobreexpuesto o más bien demostraron que son superiores en la división más competente de la Conferencia Americana? Me inclino más por la segunda opción.
Es evidente que los “malosos” han sido una grata sorpresa y sin duda siguen siendo uno de los conjuntos con mayor proyección para los ´play-offs´; sin embargo, el proyecto de Andy Reid con los Jefes es un plan que desde la temporada pasada comenzó a carburar, toda vez que son uno de los equipos con mayor número de partidos ganados. La defensa que presenciamos el jueves de la semana anterior la considero de campeonato.
El problema aquí es que la historia nos ha enseñado, tal vez injustamente, que tanto el citado Reid como Alex Smith no son lo suficiente capaces para cerrar en momentos críticos. La pasta de campeón no siempre forma parte del ADN de algunos jugadores. Me imagino una hipotética final de la AFC entre Patriotas y Jefes. La diferencia entre Tom Brady y A. Smith es… olímpica.
Me parece que el descalabro de los Vaqueros de Dallas con los Gigantes de Nueva York no son tan malas noticias para Jerry Jones y compañía. Vislumbro muy difícil que los de la estrella solitaria pierdan la División Este y, de hecho, estoy seguro de que van a amarrar toda la postemporada en casa. Este tipo de situaciones permite que los coordinadores, junto con el entrenador, evalúen posibles debilidades o deficiencias.
Además, tanto Prescott como Ezekiel Elliott, tarde o temprano, iban a chocar con algún tipo de “novatada”. Afortunadamente, les ocurrió en un punto de la temporada regular donde pueden ajustar lo que sea necesario. Por su parte, estos Gigantes de Nueva York han desarrollado un estilo medio camaleónico. Su defensa sigue creciendo semana con semana, aun sin Jason Pierre Paul, y dicho factor los convierte en un equipo que logrará sembrase en la quinta o sexta posición de los ´play-offs´.
Empero, siguen sin convencer a varios analistas porque su contado ofensivo de plano no logra avanzar, además de su déficit de intercambios de balón. Pienso que esta organización tiene que considerar ya un futuro reemplazo de Eli Manning. Sus dos anillos de Super Bowl y su apellido lo mantienen en una zona de confort dentro de esta franquicia. Estoy seguro de que ya hemos visto lo mejor de este mariscal de campo.
Algunos pensamientos
Patriotas de Nueva Inglaterra es el mejor equipo de la NFL. Los Broncos de Denver están a punto de perder su corona. Empacadores de Green Bay se está recuperando pero es demasiado tarde, perderán la división con los Leones de Detroit y quedarán fuera de la postemporada. También es demasiado tarde para Vikingos de Minnesota y para los Pieles Rojas de Washington. Bucaneros de Tampa Bay, Acereros de Pittsburgh y Cuervos de Baltimore: nadie los querrá encontrar en ´play-offs´. Halcones de Atlanta, como casi siempre, se quedarán cortos en primera ronda. Panteras de Carolina, Bengalíes de Cincinnati y Cardenales de Arizona, grandes decepciones. Próximos cambios de timón: Cincinnati, Osos de Chicago, Carneros de los Angeles (dudo que quede el interino del súper perdedor Jeff Fisher). Halcones Marinos de Seattle cerrarán fuerte la temporada y serán los más peligrosos de la NFC para llegar al Super Bowl.
