IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad de México
Muy íntima y discreta fue la despedida del secretario de Cultura, Rafael Tovar y de Teresa. Sus cuatro hijos: Leonora, Rafael, María y Natalia, su viuda, Mariana García-Barcena, su hermano Fernando y otros miembros de la familia, además de sus amigos más cercanos, estuvieron presentes en la misa de cuerpo presente que ayer domingo al mediodía se le dio al diplomático, abogado, promotor cultural, historiador y ensayista fallecido la madrugada del pasado sábado.
La cantidad de arreglos florales, coronas y ramos de rosas blancas se fue incrementado durante todo el día del sábado en la capilla del Panteón Francés de Legaria, donde fueron las exequias de Rafael Tovar, pero la afluencia de amigos, colegas, políticos y funcionarios que acudieron a darle el último adiós ya no fue tan intensa como a lo largo del sábado.
Gente de la cultura como Arnaldo Coen, Rafael Barajas “El Fisgón”, Guadalupe Loaeza y Alfonso Miranda acudieron a expresar su pésame por la muerte del Secretario, un hombre que dedicó más de 40 años a la cultura, considerado “un constructor de instituciones”. Sus restos fueron cremados por la tarde en una ceremonia íntima.
