IMPULSO/ Teodoro Rentería Arróyave
Clinton será la ganadora
Éste es el súper del súper martes en Estados Unidos de América, que, vale la pena precisarlo, es el nombre oficial de la gran potencia del mundo, tal designación se debe a que en esta ocasión la elección presidencial oscila entre una candidata moderada, la demócrata, Hillary Clinton y un sujeto que cree y comulga con la caduca supremacía blanca, nos referimos al racista y misógino millonario, Donald Trump
En algún momento escuchamos que el sistema democrático, con todos sus defectos, era el mejor que había inventado la humanidad y por tanto deberíamos de defenderlo y enriquecerlo.Pues nada de esto ha sucedido, al contrario, cada día nos dedicamos a deshonrarlo y vituperarlo para en forma hasta cierto punto inconsciente, probar que no es exactamente lo que la humanidad esperaba para su beneficio, prueba de lo anterior es lo que ha sucedido, entre otros muchos países, en Estados Unidos con motivo de sus elecciones presidenciales.Todos en el mundo somos testigo, y no mudos, de un proceso que culminará hoy, al menos que se prolongue como lo ha anunciado Trump, en la etapa postelectoral. Esta ha sido una contienda no de ideas y de programas de gobierno sino de una lucha libre de bajezas y de ruindades jamás antes observada en el país que siempre se ha declarado el adalid de la democracia en el mundo.Ambos candidatos, que se precian de democráticos, a lo único que se han dedicado en sus respectivas campañas es ha insultarse y vituperarse mutuamente. Ya sabemos que Donald Trump, en esa actitud canallesca y de amenaza constante, ha declarado que desconocerá el triunfo de su contrincante y sólo lo aceptará si él es ganador. Qué fácil, lo grave es que dejará la decisión final de la contienda a los tribunales, algo impensable en esa nación, hasta que apareció este sujeto del histrionismo de la soberbia.Es un individuo, que desde un principio, se dio a conocer como un racista, como misógino, lo triste es haber descubierto que casi la mitad de los estadounidenses concuerdan con su retrograda ideología, la misma que ha creado ese monstruo depredador que todos conocemos como el imperio del dinero y que muchos otros se empeñan en negar su existencia.
El tal Trump, con el apoyo extraterritorial y del Buro Federal de Investigaciones, FBI, recurrieron a los correos que emitió Hillary cuando secretaria de Estado, es más, después de superado el escándalo volvieron con el mismo tema cuatro días antes de las elecciones, el daño lo hicieron y la Clinton bajo en las encuestas. Una nueva declaración del ente policíaco de que no había delito en contra de la ex primera dama volvió a subir las encuestas a su favor para tranquilidad de los mercados y para su vecino más cercano, México.
Hillary Clinton, como reacción inmediata de la nueva exoneración del FBI, recuperó cuatro puntos por arriba de Donald Trump [email protected]