IMPULSO/ Miguel A. García
Valle de Chalco
Enrique Peña Nieto, presidente de la República, inauguró la ampliación de la autopista México-Puebla, acción que representa la mejora de 14.2 kilómetros en uno de sus tramos más transitados, beneficiando la circulación de 150 mil vehículos al día en la zona del oriente mexiquense.
En gira de trabajo por el Municipio de Valle de Chalco, el Ejecutivo dio apertura a una moderna obra de infraestructura que mejorará la conectividad metropolitana del valle de México, pues, de manera general, se pasa de seis a 12 carriles de circulación, ocho centrales y cuatro laterales para el tránsito local. Los ocho primeros son carriles de cuota, sólo cuatro libres de peaje.
Explicó que esta acción forma parte del plan de conectividad de la zona metropolitana con el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, pues tendrá conexión con la autopista la Marquesa-Toluca, el segundo Piso del Periférico y la México-Pachuca en la entrada a la ciudad capital.
Antes de la ampliación, esta vía sufría de severo congestionamiento vial, provocando una gran pérdida de tiempo y gran contaminación. Ahora, se hace más segura y ágil, uno de las principales entradas a la Ciudad de México.
La modernización descongestiona el tránsito en la zona oriente del valle de México, beneficiando a dos millones de habitantes de las delegaciones de Ixtapalapa y Tláhuac y a los municipios de los Reyes la Paz, Valle de Chalco e Ixtapaluca.
Con ello, se duplica la capacidad operativa de la vía, disminuyendo los recorridos en más de un 60 por ciento, se pasa de más de una hora a sólo 25 minutos en horas pico.
