IMPULSO/ Eliseo Lugo Plata
Una cortinota de humo
ORIENTE: El asunto magisterial en Oaxaca y Chiapas ha crecido, mucha gente se pregunta por qué el Gobierno federal no ha actuado conforme a Derecho y pone en cintura a los miembros de la CNTE, que, día con día, cometen actos vandálicos y han terminado, por así decirlo, con la economía de aquella región.
La situación ha llegado a tal extremo que los empresarios de la COPARMEX y CANACO comenzaron a presionar, sin embargo, el terrorismo fiscal los ha frenado, y el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villareal, les ha prometido migajas a los artesanos de aquellas latitudes por las pérdidas registradas.
La situación es mucho más grave de lo que se puede apreciar en los medios de comunicación o en la propia escena del crimen. Los analistas apuestan a que ese conflicto, que si bien es originario en forma natural por la CNTE, es el propio Gobierno federal el que lo ha acrecentado o promovido.
OCCIDENTE: La situación es sencilla, el Gobierno federal no pudo contener ni controlar un problema que no fue suyo, sino creado en Iguala por los grupos fácticos y las autoridades municipales emanadas del PRD, al grado que, con el paso del tiempo, la propia sociedad le fue echando la culpa al gobierno de Peña Nieto por las inconsistencias de su investigación.
El movimiento iniciado por los padres de los desaparecidos de Ayotzinapa, alentados por diversos grupos de poder político y económico (léase MORENA y Slim), hizo tanta presión internacional que la popularidad del Presiente bajó de las nubes a la tierra; sin embargo, apareció la “caja china” para establecer la cortina de humo que tapara el escándalo de los “padres de los estudiantes de Ayotzinapa”, que se ha diluido hasta hoy.
SEPTENTRIÓN: El problema magisterial de Oaxaca, en principio, fue frenado por el Gobierno federal, que actuó con mano dura al desaparecer al Instituto de Educación del Gobierno de Oaxaca y quitar de la nómina a cientos de vivales, acción realizada para poner una cortina de humo ante la vergüenza que fue para el Gobierno el escape de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Más tarde, cuando el problema de los desaparecidos de Ayotzinapan parecía incontrolable y nada solucionable, el propio Gobierno federal, según analistas, comenzó a alentar al problema magisterial de Oaxaca y Chiapas hasta alcanzar las dimensiones que hoy se miran y ya poco se habla de los estudiantes desaparecidos.
En las últimas declaraciones del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, con relación a la presión de la CANACO y otros organismos empresariales, ha dicho que el problema ya está por solucionarse.
MEDIODÍA: La pregunta es sencilla: ¿cómo saben que está por solucionarse? Es fácil la respuesta porque si el propio Gobierno es quien alienta al movimiento, es el propio Gobierno el que lo habrá de parar cuando se le pegue la gana.
Un grupo de periodistas hemos coincidido en esto e incluso en la aparición de un redentor que vendría a solucionar el problema, quien sería, para cierto momento electoral, el héroe de la película.
¡Qué razón tenía Maquiavelo!
