Apuntes sobre las elecciones que vienen
IMPULSO/ Raúl Rodríguez Cortés
Dentro de un mes, habrá elecciones en trece estados, doce de los cuales renovarán gobernadores: Aguascalientes, Hidalgo, Quintana Roo, Tlaxcala, Chihuahua, Oaxaca, Sinaloa, Veracruz, Durango, Puebla, Tamaulipas y Zacatecas.
El líder del PRI, Manlio Fabio Beltrones, ha asegurado que su partido ganará al menos nueve de esas 12 gubernaturas, aunque las encuestas más recientes no parecen darle del todo la razón.
A un mes de los comicios, sólo Hidalgo, donde Omar Fayad trae todo el apoyo del gobernador Francisco Olvera y del grupo que encabeza nada más y nada menos que el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, no le quita el sueño al líder del Tricolor. Los demás estados no se ven tan fáciles.
En Aguascalientes, el problema no es que haya buenos candidatos opositores, sino el mediocre gobierno de Carlos Lozano de la Torre que muy poco ayuda a la candidata tricolor de Lorena Martínez Rodríguez y favorece al albiazul Martín Orozco Sandoval.
En Tamaulipas, el gobernador Egidio Torre y el propio PRI nacional han dejado muy solo al candidato Baltasar Hinojosa, quien tiene todo el apoyo del secretario de Hacienda, Luis Videgaray, pero la mala fama de sus vínculos con el ex gobernador Tomás Yarrington y sus turbios negocios, y que, de ribete, desplazó en la contienda interna a Marco Antonio Bernal, el consentido del líder nacional priísta.
En Tlaxcala, donde fracasó la alianza PAN-PRD, la perredista Lorena Cuéllar y la panista Adriana Ávila, van alternando en las preferencias ciudadanas, sin permitir que saque cabeza el priísta Marco Mena.
En Chihuahua, el pésimo desempeño del gobernador César Duarte ha dado lugar a un fenómeno muy parecido al de Nuevo León: la aparición de un candidato independiente fuerte, apoyado por el empresariado: José Luis Barraza, aquel que desde el CCE patrocinó la campaña anti López Obrador, la peligro para México, y que después fue recompensado con la ventajosa venta de Aeroméxico, de la que fue presidente. Y por si no bastara esa fuerte candidatura independiente, el priísta Enrique Serrano tiene enfrente también al combativo panista Javier Corral.
En Quintana Roo, no despunta la candidatura tricolor de Mauricio Góngora, imposición del gobernador Borge y del ex gobernador Félix González Canto, frente a quien era el aspirante natural Carlos Joaquín que, ante el desaire tricolor, aceptó la postulación PAN-PRD y ha tomado la delantera.
En Durango, las alarmas en el PRI nacional y el’ cuarto de guerra’ del candidato Esteban Villegas siguen encendidas, no obstante las señales de que se diluye la fuerza del panista José Rosas Aispuru.
