Por Ivan A. López
Chalco.- Ante la amenaza de los bomberos de Chalco de realizar una manifestación para exigir la destitución del comandante Adrián Díaz Chávez Arias, el gobierno morenista les ofreció investigar las quejas en contra de dicho funcionario, aunque los tragahumo adelantaron que si se queda en el cargo prefieren renunciar y que los liquiden conforme a la ley.
Aunque el alcalde no ha querido atenderlos, para desactivar la manifestación, los tragahumo fueron convocados a una reunión con el secretario del Ayuntamiento Cesar Enrique Vallejo Sánchez y el director de la policía Mario Rodea Mayorga, para analizar sus inconformidades y buscar una solución.
Como resultado de dicha reunión donde los bomberos externaron todas las inconformidades por los malos tratos y amenazas que reciben del subdirector Adrián Díaz y la falta de equipamiento por otro lado, los funcionarios solicitaron a los inconformes un tiempo de aproximadamente 20 días para realizar las investigaciones y poder determinar cómo resolver las quejas.
Sin embargo, los bomberos adelantaron que no cederán a que el comandante continúe en su puesto porque ya no existe un ambiente de trabajo tranquilo, por lo que están dispuestos a renunciar todos y que los liquiden.
En cuanto las demás necesidades como equipo de trabajo, dormitorios adecuados o un lugar donde poder calentar sus alimentos, entre otras cosas, a partir de este día el contacto directo con ellos será el director de Seguridad Pública, Tránsito y Bomberos Mario Rodea, con quien van a buscar las alternativas y prioridades de sus requerimientos.
El problema en la corporación tiene tiempo, pues los malos tratos del subdirector y la falta de atención del alcalde morenista, Miguel Gutiérrez, se fueron acumulando hasta que los rescatistas decidieron unirse para evitar que siguieran atropellándolos.
Adrián Díaz Chávez Arias se encuentra en el cargo desde la administración del extinto alcalde Juan Manuel Carbajal en el 2016 y convence a los alcaldes para continuar en el cargo, presumiendo que la corporación está certificada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y por Departamento de Seguridad de Estados Unidos, pero nadie tiene ningún documento que avale eso, dijo uno de los elementos.
