- La clase trabajadora necesita tener derechos reales, que en la práctica permitan condiciones dignas, que después de ocho horas diarias de trabajo, tenga lo suficiente para su subsistencia.
Con 35 años de neoliberalismo y 52 millones de mexicanos en pobreza, la justicia social está pendiente y el Derecho del trabajo pasa por un momento difícil, las recientes reformas laborales son el medio, pero no el fin; se necesita “un nuevo rostro de respeto a la dignidad del trabajador”, enfatizó Quetziquel Flores Villicaña, investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Lo anterior, al comentar el libro “Ley Federal del Trabajo comentada”, de los autores: Arturo Alcalde Justiniani, Eugenio Narcia Tovar y Alma Ruby Villareal; mismo que fue presentado en el Poder Judicial del Estado de México, que encabeza Ricardo Sodi Cuellar.
La catedrática de la UAM sostuvo que pensar en un país con una democracia real, implica también contar con niveles de bienestar mínimos garantizados y eso sólo se puede conseguir a través del cumplimiento de las normas laborales.
Como investigadora dio la bienvenida a las recientes reformas laborales que son comentadas en el libro, sin embargo, motivó al auditorio a “leer entre líneas”, para entender el objeto del Derecho del trabajo y su llamado histórico a la reivindicación de la clase trabajadora, misma que necesita tener derechos reales, que en la práctica permitan condiciones más dignas.
Flores Villicaña resaltó que después de 35 años de un modelo neoliberal, llegar a 2018 y contar con las reformas que analizan los autores, “es un momento para hacer historia”, porque como país hemos estado alejados del principio de justicia social.
El país ha estado alejado del principio de justicia social; por eso deben hacerse vigentes los compromisos adquiridos en la Ley Federal del Trabajo.
Basta tomar en consideración, dijo que existe una situación donde las estadísticas señalan que hay 52 millones de personas en pobreza; donde gran parte de los trabajadores, después de ocho horas de trabajo, llegan al final de la semana o de la quincena, sin tener lo necesario para tener la subsistencia.
“Hoy, más que nunca se debe dar vigencia a los compromisos adquiridos en la Ley Federal del Trabajo” y que se asuman los desafíos de la sociedad digital que llegó para quedarse y ha transformado las relaciones laborales.
Detalló que las reformas que se presentan en materia colectiva atienden a cristalizar compromisos que había hecho México desde hace décadas, sobre la libertad sindical, la negociación colectiva y la huelga. “Todos entendíamos que vivíamos una democracia, pero en los sindicatos, en la vida colectiva y en los trabajadores era solo una promesa”.
Por eso, resaltó el esfuerzo de los autores de comentar la ley, misma que tiene una posición ideológica, que “representa una convicción”, ya que no se puede entender una mejor calidad de vida de un trabajador, si no es a través de la negociación colectiva.
