Por: Arturo Albíter Martínez
Alcaldesa de Metepec y sus ansias por repetir en el cargo la llevan a enfrentarse con diferentes sectores, ahora no le importó hacerlo con la COHDEM.
Comentario del día: Diálogos para la Recuperación. Ahora el tema fortalecer MiPymes Mexiquenses. Un día antes Macario Schettino les hizo fuerte crítica.
Apenas ha pasado un poco más de la mitad del periodo al frente de la presidencia municipal de Metepec y la alcaldesa Gabriela Gamboa ya dejó en claro que eso de la política no se le da, lo mismo que el diálogo y lograr acuerdos, todo lo contrario, cuando alguien la contradice entonces busca la imposición.
Al más puro estilo de “conmigo o contra mí” ahora apuntó como enemigo al comisionado de los Derechos Humanos en el Estado de México, Jorge Olvera porque el organismo realizó un pronunciamiento contra todo acto de las autoridades que limite, intimide y criminalice la protesta pública en relación a los hechos que se registraron cuando intentaron instalar un cuartel de la Guardia Nacional en el Parque de la Pila.
Pero la actuación de la presidente municipal de Metepec en este momento no se debe únicamente a un enojo aislado por lo que ocurrió en La Pila, lo que pasa es que entre sus aspiraciones se encuentra la de repetir al frente del Ayuntamiento una vez más.
Y eso la lleva a buscar enemigos en todos lados, incluso entre priistas que tienen un tiempo sin radicar ya no digamos en el municipio, ni en el estado como es el caso de Carolina Monroy.
El PRI debilitado, aunque Ana Lilia Herrera hace de todo, muchas veces sin contar con el aval del llamado primer priista y como el año entrante termina de diputada federal, busca consolidar su presencia política en ese municipio y se dedica a realizar mesas de análisis de cualquier tema que sea de actualidad.
Con el visible candidato del PAN, Fernando Flores, ya tuvo algunos roces.
Si la alcaldesa se enfrenta a posibles aspirantes de oposición que buscan ser candidatos se entendería de alguna forma, pero contra el comisionado de Derechos Humanos parece un exceso.
Y todo se desprende del pronunciamiento en contra de actos de autoridades que buscan criminalizar o coartar la protesta pública, al tiempo que reitera su respaldo a la movilización que fue impulsada por el Colectivo Abracemos el Parque la Pila de la que forma parte la activista Diana Bobadilla.
Y es que a Gabriela Gamboa no le gustó nada tener que revocar el comodato con el que aprobaba la instalación de una base de la Guardia Nacional presionada por el colectivo y por la negativa de las fuerzas de seguridad federales a instalarse en una zona donde los vecinos estaban en contra.
Y es que desde aquel día Diana Bobadilla ha sido objeto de persecución de parte de la autoridad municipal al grado que acusarla de ataque a vías de comunicación, además de ser intimidada y amenazada incluso de muerte.
Así que para Gabriela Gamboa el nuevo enemigo es Jorge Olvera por pronunciarse en contra de su gobierno para que no violen los derechos humanos de una activista.
Y todavía le faltan 16 meses al frente de la administración municipal, porque si en Morena le dan la oportunidad de repetir como candidata, podría no dejar el cargo de acuerdo a una ley que se revisa en la Legislatura local que les da la facultad para llevar el control del Ayuntamiento y además hacer proselitismo.
COMENTARIO DEL DÍA: DIÁLOGOS PARA LA RECUPERACIÓN ECONÓMICA, AHORA EL TEMA APOYAR A LAS MIPYMES. UN DÍA ANTES MACARIO SCHETTINO “REVENTÓ” A ESAS UNIDADES ECONÓMICAS.
En el segundo día de Diálogos para la Recuperación Económica Mexiquense evento impulsado por el Gobierno del Estado se abordó el tema “Fortalecer a las Mipymes Mexiquenses”.
En este caso llamó la atención que un día antes el panelista Macario Schettino, investigador del Tecnológico de Monterrey puso el dedo en la llama al hablar de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Mipymes), sobre todo las que se encuentran en el primer caso, porque afirmó que creer que estas unidades económicas sirven de algo es erróneo.
Tanto incomodó que incluso el subsecretario de Fomento Industrial César Guerrero no hizo referencia a este tema cuando intentaba hacer un resumen de cada participación.
Macario Schettino fue claro y contundente. Afirmó que las Mipymes en México no son empresas, son “maldiciones familiares para sobrevivir”. Y fue más allá, al dejar en claro que desde su punto de vista, es erróneo creer que sirven de algo, ya que son extraordinariamente improductivas.
Dijo entender que se escucha bonito y es atractivo para la gente hablar de ese tema, es parte de atraer votación y es parte de la “chamba” de los secretarios, pero si quieren resolver el problema económico además de lo que hacen para la parte electoral van a tener que retener a los grandes empresarios, son los que van a jalar a las pequeñas y medianas empresas.
Y su cierre no pudo ser mejor “perdón por ser tan claro, pero para eso me invitaron”
Con ese antecedente, el martes le tocó el turno como oradora principal a Rocío Abud, directora general de Fundación Coppel para tocar el tema y llamó la atención que al final de su exposición dejó de lado a los micro-negocios y sólo se refirió a las pequeñas y medianas empresas.
Explicó que las Unidades Económicas de menor tamaño son las más vulnerables y ofreció un amplio panorama sobre los indicadores que rodean a este sector.
Las Mipymes representan el 99.8% de las empresas en el país, pero sólo aportan el 52% del ingreso total nacional; reúnen el 75 del empleo si se toma en cuenta los que laboran medio tiempo y los que no son remunerados.
Para el caso del Estado de México ocupa las cifras del penúltimo censo económico reportado por el INEGI, ya que anota que son 623 mil 422 unidades económicas, donde se ocupan a 2.5 millones de personas. Destacó que el sector terciario y la industria manufacturera fueron los más afectados durante la contingencia.
Posteriormente sólo habló de las Pymes que son más de 11 mil unidades económicas y generan el 10% del ingreso nacional, así como el 8% del empleo en el país.
Fue importante cuando dijo que de acuerdo a diversos pronósticos la recuperación de la economía a niveles pre-covid19 será hasta el 2023 o a finales del 2024.
El impacto en las pymes se resumen de la siguiente manera: el 7% detuvo operaciones y de las que operan lo hacen al 50% de su capacidad; más del 90% sufrió una drástica disminución de sus ingresos y sus ventas cayeron hasta en 69%
Otro 68% enfrenta problemas de liquidez; el 47% despidió en promedio al 44% de su plantilla laboral y un altísimo 96% dice requerir algún tipo de apoyo financiero.
Por lo que toca a los micro-negocios explicó que entre empresas como embotelladoras o las que tienen el pulso a detalle sobre todo de las tiendas de abarrotes, destacan que el 16% cerraron sus puertas.
De este panorama deben partir para impulsar a las Mipymes.
Algo difícil de lograr si insisten en licitar a un solo proveedor millones de pesos.
