Analizan la necesidad de cambiar paradigmas sobre el rol que desempeñan hombres y mujeres en las responsabilidades del cuidado del hogar y las labores domésticas.
Es indispensable plantear una nueva distribución de las labores domésticas y repensar la manera en que hombres y mujeres se involucren en el cuidado del hogar y de los hijos, y esta contingencia es un buen momento para empezar con estos cambios, consideraron especialistas en equidad de género.
Como parte de las acciones de prevención de la violencia contra las mujeres, la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas del Estado de México (CEAVEM), realizó el foro virtual “Compartiendo las labores del hogar y de cuidado durante y después del Covid-19”, con la participación de especialistas en materia de género y políticas públicas.
Jacobo Cuéllar Ocampo, jefe del Departamento de Políticas Públicas de la CEAVEM, destacó que durante la contingencia sanitaria que actualmente se vive, se ha hecho más evidente el problema de desigualdad que enfrenta el sector femenino, a quienes social y culturalmente se ha adjudicado la responsabilidad de realizar las labores y el cuidado del hogar.
De ahí la importancia de reflexionar y cambiar paradigmas sobre el rol que deben desempeñar tanto hombres como mujeres en las actividades domésticas, y de involucrar a niñas y niños en estas actividades sin discriminar por estereotipos de género.
Adriana Sánchez Huitrón, especialista en Género y Políticas Públicas, coincidió en que la división sexual del trabajo ha tenido mayor impacto durante estos días de contingencia.
Precisó que, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Uso del Tiempo, el promedio de horas semanales que las mujeres dedican al trabajo doméstico no remunerado es de 29.8 horas a la semana, en contraste con las 9.7 horas que dedican los hombres a las mismas actividades.
Bajo esta premisa, puntualizó la importancia de revalorar y asumir la responsabilidad del bienestar común de la familia y todo lo que ocurre al interior del espacio doméstico, de tal manera que hombres y mujeres trabajen de manera corresponsable para hacer equitativas las cargas de trabajo.
“Redistribuir y reducir las cargas de trabajo sería la principal responsabilidad de quienes estamos cohabitando un espacio, hay que participar en la familia hay que empezar a rediseñar el modelo.
“En esta contingencia en gran medida han sido las mujeres quienes han estado sosteniendo, por así decirlo, esta parte de la reproducción social, de la vida, de que las demás personas que están a su alrededor tengan la oportunidad de poder realizar y continuar realizando sus actividades de manera regular”.
JACOBO CUÉLLAR
CEVECEM.
En tanto, Susana Munguía Fernández, jefa del Departamento de Equidad de Género CIEG UAEM, enfatizó que durante años las mujeres han desempeñado diversos roles, no obstante durante el confinamiento, se ha hecho más evidente la carga de trabajo que enfrentan, pues aunado a sus roles laborales, también deben atender las labores de higiene en el hogar y el cuidado de la familia.