Ayer Calles lucieron semivacías de presencia de mujeres toluqueñas, al sumarse al movimiento nacional el “9 nadie se mueve”, otras apoyaron de manera simbólica, pues trabajaron por necesidad
Miguel Á. García/Toluca
Fotos: Delfino Hernández
Calles vacías o predominantemente con varones rompieron la creencia de una sociedad mexiquense apática y desinteresada; las mujeres mexiquenses dieron un paso al frente mostrando civilidad en la protesta sumándose paro nacional un Día sin Nosotras, en el Nueve nadie se mueve.
Tras las marchas históricas registradas este ocho de marzo, este lunes fue evidente menor presencia de femeninas en las calles; quienes decidieron no sumarse exponían sus razones para quedarse al margen de la ola feminista, aquellas que son el único sustento de sus casas son quienes básicamente decidieron quedarse al margen.
“Al final hay que trabajar, no le puedo decir a mi hijo, hoy no te voy hacer de comer porque es un ser humano y hay que educarlo no se puede frenar porque no hay mamás solteras mamás que tienen esposos que tenemos que seguir con nuestras actividades no nada más somos mamás somos seres humanos somos trabajadoras hay que seguir” Lorena Corán, mujer mexiquense.
“Muchas de las mujeres vivimos al día respeto su forma de manifestarse pero no se puede, la vida sigue tenemos que seguir”, Olivia Trejo mujer mexiquense.
Apoyo en lo moral y simbólico de la protesta para la erradicación total del de la violencia de género pero advirtiendo oposición en las formas de la manifestación tanto en el paro de actividades como en la violencia y daños generados en las marchas.
“No hay que callarnos pero hay otras formas, el salir y hacer destrozos no creo que hable de una mujer y un género, debemos de demostrar que estamos inconformes pero no agrediendo no maltratando” Lorena
“Tenemos el derecho de manifestarnos pero hay que tener cuidado porque todo eso lo ven los pequeños el mensaje que le damos a las mujeres es eso lo tenemos en las manos” Olivia Trejo.
El sector que decidió mantener su actividad diaria además de adolecer falta de oportunidades para dejar su trabajo, asume parte de la responsabilidad de la violencia que se vive en las calles al indicar que es dentro del seno familiar donde se deben gestar estos grandes cambios sociales por los que pugnan las mujeres en las calles.
“Yo creo que nos tenemos que sumar de otra forma, educando, trabajando demostrando que realmente no somos un género débil al contrario que podemos hacer cosas que la gente no se imagina hay que educar, hay que trabajar y demostrar que lo podemos hacer de una manera diferente, con derechos, actividad y educación”
Lorena N
mujer mexiquense.
“Está bien pero deberíamos iniciar como mujeres en casa en la educación de los hijos varones, si son pasivas las marchas no hay ningún problema pero si inclinan a la violencia yo creo que nos afecta a todos”,
JULIETA ORTEGA,
mujer mexiquense.
