IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad de México
El refinanciamiento de la totalidad de la deuda del país y de Pemex que realizó el gobierno de México permitirá al país enfrentar un escenario en el que empeore el entorno global, dijo el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría Treviño.
Durante la presentación de las Perspectivas Económicas de la OCDE, el titular del organismo aseguró que el enfrentamiento entre Estados Unidos e Irán genera más incertidumbre y ello afecta a un país que tiene una economía abierta como México.
“La verdad es que el entorno es muy complicado, muy difícil y se complica un poco más todos los días, en virtud de acciones que no tienen nada que ver con la política económica. Pero en donde la política, la política de seguridad y otros tipos de políticas hacen que se complique más los programas económicos”.
El representante del organismo internacional estuvo acompañado del presidente del Consejo Mexicano de Negocios, Antonio del Valle Perochena; la presidenta del Consejo Ejecutivo de Empresas Globales, Claudia Jañez, y la secretaria de Economía, Graciela Márquez.
En el evento, el titular de la OCDE comentó que producto de las tensiones entre Estados Unidos e Irán, el petróleo “está arañando los 70 dólares por barril”.
Sin embargo, dijo que hay una protección por el refinanciamiento de la deuda que realizó el gobierno mexicano, para la totalidad del endeudamiento y para Pemex, ya que en el caso de la petrolera ese problema dejó de ser un dolor de cabeza.
“La primera semana de enero se concretó una operación financiera que refinanció la totalidad de las necesidades financieras para 2020, nadie nos va a agarrar con los dedos en la puerta si se empeora el entorno internacional, pero además parte de ese esfuerzo fue el refinanciamiento de la deuda de Pemex”, explicó.
En clara alusión a las declaraciones que hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador de que Gurría no tenía calidad moral y que llevó a la bancarrota al país, el secretario general de la OCDE explicó que cuando hizo un comentario sobre que el gran dolor de cabeza de México era la deuda de Pemex, “el Presidente me jaló bastante duro las orejas”, pero ahora ese problema “no nos va a quitar el sueño”.
Agregó que es deseable que se hagan reformas estructurales y “reformas de las reformas”, aunque admitió que eso sería lo ideal, porque con la llegada de otros partidos políticos al poder, nuevas formas de pensamiento y por intereses de grupo, no siempre es posible.