Público mexicano disfruta por vez primera a Billy Idol

IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad de México
Cientos de fanáticos mexicanos, algunos que ya superaban los treinta o cuarenta años de edad, conmemoraron sus mejores años al cantar a todo pulmón las canciones del músico Billy Idol.
Algunos de los fanáticos que asistieron al concierto se presentaron ataviados con un estilo rockero; otros simplemente vestían de negro o bien presumían su camiseta serigrafiada con el logotipo de Billy.
Otros más, que en los años 80 vivían en pleno su adolescencia o juventud, venían acompañados por su pareja, tal vez ya marido o esposa, también con su familia y los más con amigos en busca de la nostalgia por el new wave.
Al desarrollarse el recital, muchos de los fans cantaban y gritaban, pero de vez en cuando tomaban aire y hasta un trago de cerveza para recobrar fuerzas y seguir bailando las canciones emblemáticas como “Dancing with myself” y “White Wedding”.
Mientras que en otras piezas como la balada rock “Eyes Without a Face” los asistentes aprovechaban para tomar asiento y acompañar al cantante con el flash de su celular o incluso para romancear con la pareja.
Pero en cuanto el cantante comenzó a interpretar “Rebel Yell” comenzó la euforia, pues varios fanáticos comenzaron a moverse con bailes “punketos”, alzando las manos, haciendo símbolos rockeros, saltando, gritando, zapateando y moviendo las manos al ritmo de las estruendosas guitarras.
Al seguir con el resto de canciones, el público comenzó a lanzarle algunas prendas al cantante y otros lograban darle la mano.
El cantante de 63 años, agradecido con sus fans, les correspondía lanzando algunas baquetas y plumillas, además de saludar a todos los que podía, no sin antes darles el merecido agradecimiento por asistir a su concierto.
Al finalizar la noche, Idol sorprendió son su solo de guitarra y cerró con broche de oro con la canción “Money Money”, aunque los mexicanos se quedaron con ganas de más, pues esperaban que el artista les regalara “Love and Glory”.
Tal vez lo merecían, después de que aquéllos jóvenes de los años 80 esperaron más de 30 años para disfrutar del rock energético de Idol.