IMPULSO/ Gonzalo Vaca
En 1997, la Agencia Mexicana de Noticias (NOTIMEX), dirigida por el gran Jorge Medina Viedas, se significaba por ser una noble empresa que entonces iniciaba su modernización, a través del acceso a las nuevas tecnologías, se significaba además por ser un excelente patrón y formador de periodistas; era un gozo formar parte de sus filas; era entrañable entrar a las oficinas y no querer salir hasta ver los cables noticiosos publicados en algún medio nacional o internacional.
Este orgullo es confirmado por testimonios publicados el 30 de septiembre de 2018, en razón del 50 aniversario de la Agencia: “Yo creo que es un año de alegría, en que deberíamos estar todos contentos por lo que significa Notimex y lo que hemos aprendido aquí, porque es un medio muy importante, un formador de profesionistas”, asegura Simón, quien llegó a esta institución hace 38 años, en febrero de 1980, como “officeboy”. (http://ntx50.notimex.gob.mx/nota/602459)
Efectivamente fue un orgullo y semillero de grandes profesionales de la comunicación. Importantes periodistas pasaron por su redacción y reconocidos corresponsales dieron cuenta del acontecer diario de México ante el mundo y viceversa.
Divididos en secciones internacionales, la Agencia otorga servicios informativos tanto a norte, centro y Sudamérica, como a Europa, Asia, Africa y Oceanía. Si bien tiene una participación de mercado de apenas un 12 por ciento, este porcentaje es suficiente para que cientos de medios nacionales e internacionales se nutran con sus reportes informativos.
Hoy al menos unos 30 periodistas, corresponsales de NOTIMEX, diseminados en 24 países del mundo han hecho pública la denuncia de ser lastimados en sus derechos como trabajadores y vilipendiados en su quehacer periodístico.
Si bien no es un situación nueva; desde el año 2000 como resultado del triunfo avasallador de Vicente Fox, la Agencia se vio envuelta en una vorágine de descalificaciones que puso su credibilidad y viabilidad en entredicho, con la consecuente falta de compromiso y empatía del gobierno con este ente informativo del Estado Mexicano que, tras una reforma a sus estatutos, se transforma en “Agencia de Noticias del Estado Mexicano”, durante el gobierno panista de Felipe Calderón.
Hay que recordar que su origen se remonta a 1968, meses antes de los Juegos Olímpicos de ese mismo año, con el propósito de tener un centro generador de información que “bañara” a todo el mundo con los reportes de la magna jornada deportiva; al termino de ésta, la Agencia se quedó emulando a otras de corte internacional, como la francesa AFP; la inglesa REUTERS; la china XINHUA; la española EFE; la alemana DPA; la norteamericana AP o la RIA Novosti, de Rusia, por ejemplo. Les ha peleado palmo a palmo cada nota, con las limitantes de una y las opulencias de las otras.
Hoy, la Agencia es utilizada para golpear al oponente; perdió el foco y el principio rector de informar con equilibrio profesional, corroborando en todo momento la veracidad de la fuente informativa; hoy como ayer está inmersa en una crisis comercial y presupuestal, pero hoy como nunca se cierra al diálogo.
Hoy, los trabajadores de NOTIMEX, no solo lo que están en el extranjero lamentan que la dirección general de la Agencia los haya obligado, bajo amenaza de despido, a firmar contratos anuales como prestadores de servicios y que el último contrato haya tenido vencimiento el 31 de diciembre pasado y desde entonces no se les ha pagado y se les despide sin liquidación o reconocimiento alguno.
“Tenemos derechos adquiridos ya que, en los hechos, éramos trabajadores en relación de dependencia que nunca formamos parte del Sindicato ni tuvimos vínculo con su líder, cuyos manejos están siendo investigados”, se quejaron en una misiva de profusa difusión entres los medios nacionales, pero ningún medio o autoridad se solidarizó con este grupo que siempre dio la cara –para bien o para mal- del devenir histórico de México. El ataque directo al sindicato y a la Dirección General de esa dependencia, es la razón de que “ni los vean, ni los oigan”. Mientras tanto la 4T y SanJuana, bien Gracias
En estos días aciagos para los compañeros de NOTIMEX, viene a mi mente aquel mes de febrero de 1999, después de una junta de jueves en la mesa de Opinión, encabezada por Don Jorge Medina Viedas, quien en la cabecera de la mesa, nos daba a conocer la posibilidad de “un recorte presupuestal”, lo que obligaría a redimensionar el proyecto. La disyuntiva era seguir adelante con la modernización o quedarnos como estábamos: sin equipamiento y sin personal.
La decisión era difícil y lo lamentaba, pues tenía entre manos un ambicioso proyecto para redimensionar a la Agencia, convertirla en la mejor a nivel internacional, que fuera referente de México ante el mundo, decía.
No demoró mucho tiempo la decisión. Dos jueves después, Don Jorge llegaba visiblemente afligido a la junta de la mesa de Opinión para confirmar el recorte. Al término de la reunión, un joven e incipiente articulista se acercó para decirle: Don Jorge, no se preocupe. Ánimo. Mire, yo puedo trabajar gratis para la Agencia, si sirve de algo.
La respuesta no se hizo esperar. Don Jorge Medina Viedas, se paró y con firmeza volteó a ver fijamente al joven articulista: No maestro, nunca nadie debe trabajar gratis. El trabajo no se regala. La dignidad es un valor. Es un derecho, así es que váyase a su casa y deje de decir tonterías. Fue rudo y duro, pero dejó marcada una lección de vida, al menos a ese naciente articulista que apesadumbrado salió de la sala de juntas de NOTIMEX y quedó agradecido por siempre con Don Jorge y con la Agencia. Así es que hoy como hace 20 años la dignidad de ésos y de todos los trabajadores, no puede ser negociada. Solidaridad con los corresponsales de Notimex y con todo el gremio periodístico; uno de los más celosos y divididos. Esa es la grieta que aprovechan los sinvergüenzas. ¡Cuidado México!
