IMPULSO/Agencia SUN
Ciudad de México
Como todo niño que ha crecido viendo películas de Disney, sabe que la muerte no es ajena a ellas. Por el contrario, en las 57 de las 81 cintas de Disney y Pixar correspondientes al periodo de 1937 a 2015 (de “Blanca Nieves” a “Intensamente”) un total de 71 personajes no vive para contarla. Varias son las formas en que la muerte es representada en estas películas sobre cómo afrontar la muerte de alguien cercano a partir del comportamiento de Bambi, del anciano globero Carl, en “Up”, o de la princesa Moana, de la película homónima.
Tres estudios recientes han analizado de qué manera se ha mostrado la muerte en las cintas de Disney y Pixar. Los científicos examinaron dos periodos, de 1937 a 2003 y de 2003 a 2016.
1. El estatus (héroe/villano) del personaje muerto. De 1937 a 2003 el número de muertos en cada bando fue muy parecido, con 12 protagonistas (los “buenos”) y 11 antagonistas (los “malos”) muertos. De 2003 a 2016 la mayoría (70%) de los muertos fueron protagonistas, incluyendo las bajas en “Buscando a Nemo”, “Una aventura de altura” y “Moana”.
2. La forma en que muere el personaje. a) explícita, cuando sabemos que el personaje está muerto porque su cuerpo aparece dañado o sin movimiento en la pantalla; b) implícita, cuando asumimos que está muerto. A partir de 2003 hay muy pocas muertes explícitas (con la gran excepción de la de Mufasa, en la más reciente versión), lo que significa que la compañía del ratón ha decidido que es mejor no alterar en exceso a su público.
3. Estatus de la muerte. La mayoría de las muertes en toda la historia de Disney son permanentes, lo que según los investigadores es positivo porque refuerza en los niños la idea de que la muerte es irreversible. Sin embargo, la mitad de los protagonistas muertos en los filmes de 1937 a 2003 tienen la oportunidad de “regresar” de alguna manera, como el espíritu de Mufasa en “El rey león”; de 2003 a 2016, sólo Moana exhibe una escena similar.
4. Reacciones emocionales ante la muerte. Son negativas en la gran mayoría de los casos y positivas sólo en una de cada 10 muertes de un antagonista, como con Síndrome, el supervillano de “Los Increíbles”. Lo primero es positivo porque enseña a los niños que es tan apropiado como entendible que la muerte de alguien les produzca emociones negativas.
5. Causa de muerte. Puede estar justificada o no, lo que significa que, por su mal comportamiento, la muerte puede ocurrirle a quien se la merece, si le pasa a alguien como Gastón al perder el equilibrio por enterrar un cuchillo a Bestia, Disney mata dos pájaros de una cuchillada: se deshace accidentalmente del villano y mantiene impoluto al héroe. Antes de 2003 la mayoría de los protagonistas que murieron lo hicieron por culpa de sus antagonistas; después de 2003, casi todas las muertes fueron accidentales, lo que significa que Disney está dejando atrás el mensaje de que es más o menos común matar a alguien.
6. Mecanismos a los que recurren los personajes para afrontar la muerte. Debido a su buena reacción, algunos se convierten en modelos a imitar por los niños para sobreponerse en su propia vida. Por ejemplo, tras la muerte de su esposa en “Up: Una aventura de altura”, el viejo Carl se convierte en una persona gruñona y agresiva, y se aísla del mundo hasta que vuelve a crear un vínculo afectivo con Russell, lo que le permite hacer las paces con el mundo.
De todas las muertes analizadas, sólo dos ocurren de manera natural por ser ancianas: Ellie en “Una aventura de altura”, y la abuela de Moana. Como en otros temas, Disney está cambiando poco a poco y para bien, mostrando cómo sus personajes asimilan la muerte de alguien con ayuda de sus seres queridos.