IMPULSO/Agencia SUN
Nuevo León
Tigres está cerca de la séptima. El equipo de Ricardo Ferretti hizo que el juego marchara a su ritmo y se fue con la ventaja de 1-0 en el de ida de la gran final del Clausura 2019 ante León.
El gol no define nada, pero la forma sí; los del norte fueron mejores, mucho más que una Fiera a la que le han cortado las garras, no es el mismo equipo que en el torneo regular, ni en lo colectivo ni en las individuales. Por esto los Tigres se llevan confianza a la vuelta.
Además de todo, el triunfo fue con un gol histórico André-Pierre Gignac, porque anotó el de la victoria y empató la marca de Tomás Boy como máximo goleador, con 104 tantos.
Todo queda para la vuelta, como lo planteó “El Tuca”. La estrategia de Ricardo Ferretti fue tener el balón, jugar en 30 metros y desconectar al León, que alargó su zona de juego, lo que dejó aisladas a sus figuras. Mientras los regios entraban en bloque al ataque, los guanajuatenses lo hacían por esfuerzo propio, balón en largo de Luis Montes a las puntas, Joel Campbell y Vinicio Ángulo. Y así la lógica otra vez tuvo la razón. Los Tigres llegaron más acompañados y por eso anotaron.
Rafael de Souza filtró a Luis Quiñones, quien disparó y Rodolfo Cota alcanzo a desviar, pero la pelota le cayó justo a Gignac, letal frente a la puerta Esmeralda.
La Fiera tuvo la suya cuando el balón en largo le llegó a Ángel Mena, pero el ecuatoriano no anda fino, perdió de vista el balón y Nahuel Guzmán salvó.
La necesidad hizo al León adelantar filas, y ni por eso le quitaron la pelota a Tigres, que comenzó a darle un baile a la visita con base en paredes y pases filtrados.
La realidad es que los universitarios están más cerca del título, la séptima corona, mínima ventaja pero ventaja al fin.
Muchos dicen que los del norte ya tienen una mano en el trofeo, ¿o dejaron vivo al León?
