IMPULSO/ Agencia SUN
México
La sexta reunión entre la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, la Secretaría de Educación Pública (SEP) y diputados morenistas terminó sin acuerdos.
De acuerdo con lo que reconocieron ambas partes, el tema que está trabando el avance de las negociaciones son las evaluaciones para ingreso, promoción y reconocimiento, y las certificaciones de las escuelas que propone el dictamen.
Estos son los temas “malditos” que trabaron la discusión.
“Es de estas historias de confusiones, hay conceptos que ya están como malditos y generan mucha confusión, por ejemplo la certificación (…). En la mesa de los partidos hay algunos términos que generan incertidumbre e inconformidad y en la de los maestros, las evaluaciones que hay que proscribirla. De lado de los partidos, el escalafón. Ahí vamos, conciliando las dos mesas”, dijo el diputado Mario Delgado, coordinador de la bancada morenista en San Lázaro.
Para los maestros, la discusión no avanzo por el tema del sistema para el ingreso al magisterio, así como la promoción el reconocimiento, además de las atribuciones que se le darán al Centro Nacional para la Revalorización del Magisterio y la Mejora Continua de la Educación, que sustituye al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE).
“Necesitamos dejar claro que la educación pública no necesita certificaciones sino una evaluación integral de todo el sistema educativo, las escuelas, las condiciones generales de trabajo y de las escuelas”.
La única coincidencia es que volverán a reunirse. Los profesores no descartaron volver a bloquear los accesos al Palacio Legislativo de San Lázaro, en caso de que se suba al pleno la discusión del dictamen en los términos actuales.
“Estuvimos conversando sobre la excepción laboral. Acordamos mantener el diálogo, reinstalar una mesa de trabajo específica que es posible se desarrolle esta semana y una marcha que iniciará a las 09:00 de la mañana del Zócalo a la cámara de diputados. Estamos dispuestos a que las propuestas que hagamos de forma concreta se puedan retomar y ahí se verá la voluntad política”, dijo Enrique Enríquez Ibarra, dirigente de la sección 9 de la CNTE.
“El acuerdo que se tiene, ya como dijeron ellos mismos, es no subir al pleno hasta que no lleguemos a finalizar los acuerdos de las mesas de trabajo. Seguimos en disposición”.
Esta es la primera vez desde el pasado 20 de marzo que las autoridades se reúnen con la Comisión Nacional Única de Negociación, que incluye a las secciones de la CNTE en Michoacán, Ciudad de México, Chiapas, Guerrero y Oaxaca; anteriormente, durante los pasados 9 días de bloqueos, solo fueron recibidos los maestros oaxaqueños.
Del lado gubernamental participaron el titular de la SEP, Esteban Moctezuma Barragán, los diputados de Morena Mario Delgado y Adela Piña, y el asesor jurídico de la Presidencia de la República, Julio Scherer.
Los maestros y el diputado Delgado rechazaron que se esté elaborando una reforma “a modo” de la CNTE. Enríquez Ibarra dijo que los docentes, “necesitamos ser escuchados porque durante el sexenio de Peña Nieto se sufrió represión y hoy es un punto fundamentales que queden planteados los señalamientos en el texto constitucional”.
Mientras que Delgado señaló que, “no se trata de que esté a modo de los maestros o no. Va a estar a modo eso sí de los niños los jóvenes y los adolescentes y a modo de que tengan un mejor futuro”.
Por la mañana en conferencia de prensa, la disidencia magisterial advirtió que si se vota el dictamen de reforma educativa como está en el momento, el Congreso habrá de atenerse a las consecuencias y que los maestros no bajarán la guardia durante el sexenio.
